Enrique Ochoa Reza, líder nacional del Partido Revolucionario Institucional, donó el total de su liquidación en la Comisión Federal de Electricidad (un millón 200 mil pesos) a dos fundaciones de beneficencia.
Como se recordará, Ochoa trabajó apenas dos años y cinco meses como director de CFE y a pesar de que no fue despedido, sino que renunció (cinco meses atrás), la llamada empresa productiva del Estado lo indemnizó, lo que va en contra de la ley.
De acuerdo con la información proporcionada por el líder tricolor, un millón de pesos lo entregó a la Fundación Michou y Mau, que atiende a niños que sufren quemaduras. El resto fue para la Fundación UNAM, que apoya a alumnos de escasos recursos económicos para que puedan cursar estudios universitarios.
En días pasados, reporteros de la prensa nacional cuestionaron a Ochoa acerca de las donaciones y de la legalidad del pago que recibió de la CFE:
“Hace unos meses decidimos en familia donar el ingreso recibido por el finiquito de CFE. Donarlo ahora es propicio después de la desgracia en Tultepec. Hay que ser solidarios con la gente que vive una tragedia”, respondió a la primera de las preguntas.
Luego vino la segunda:“¿Por qué donar el finiquito si usted defiende su legalidad?, ¿busca lavarse la cara?”, a lo cual el priista respondió:
“El finiquito es legal y seguirá siéndolo. La donación es un acto de voluntad que no busca ocultar nada indebido. Es un acto transparente y público”.
Hay que recordar que un debate similar se dio en estos días entre los diputados federales, quienes se autoasignaron un “bono navideño” por 150 mil pesos. Ante el repudio de la sociedad, algunos afirmaron que donarían el monto a obras de beneficencia pública.
@loscabareteros