Columna de columnas nacional (19 mar 18)

Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del lunes 19 de marzo de 2018. Peña y viejo PRI controlan: ¡Atlacomulco vive!: José Antonio Meade, en condición de figura políticamente decorativa, manejada hoy desde Los Pinos con la intención de mantenerla a futuro bajo un cerco, si es que llegara a ganar la Presidencia de la República (un minimato de Peña)… Independientes tramposos… Las contradicciones de AMLO. 2018: una elección gigante…

Rayuela

No hay que saber mucho para entender que en el PRI las aguas están revueltas. Las heridas son profundas.

http://www.jornada.unam.mx/2018/03/19/

Peña y viejo PRI controlan: ¡Atlacomulco vive!

El primer dato que salta a la vista es que a José Antonio Meade Kuribreña no le permitieron colocar en los lugares privilegiados de la lista de aspirantes priístas a cargos legislativos por la vía plurinominal más que a Vanessa Rubio Márquez, su mano derecha en varias oficinas públicas (la última ocasión, como subsecretaria de Hacienda), y al subsecretario federal de Egresos, Fernando Galindo, del equipo de Luis Videgaray. El segundo dato evidente que, en el contexto, resulta más dañino para las pretensiones de Meade de promoverse como una alternativa apartidista y ciudadana, es la ostentosa apropiación que el viejo PRI y el interés de Enrique Peña Nieto han hecho de esas listas de élite: personajes pertenecientes a la historia más tradicional e impugnable de ese partido, a la par de las creaciones sexenales del peñismo, en una amalgama que deja al actual candidato presidencial, el citado Meade, en condición de figura políticamente decorativa, manejada hoy desde Los Pinos con la intención de mantenerla a futuro bajo un cerco, si es que llegara a ganar la Presidencia de la República (un minimato de Peña), o, en otra perspectiva, colocando ese peñismo a los suyos y a los institucionales en las candidaturas que van a la segura, por si el naufragio de Pepe Toño fuese inevitable y, en todo caso, al ex gobernador del estado de México hoy sólo le importara instalar una fracción suya en las cámaras a ser votadas en julio próximo (los enriquistas, como seis años atrás Felipe Calderón dejó caer a Josefina Vázquez Mota pero impuso un grupo de leales como diputados y senadores). El tamaño del agandalle pinolero hizo a los organizadores cambiar de sede y organizar una logística más propia de lo policiaco que de lo político: según se informó con posterioridad a los hechos, la directiva priísta tuvo noticias de que podría intentarse la toma del edificio nacional del partido de tres colores (a la hora de cerrar esta columna no se había precisado quién o quiénes serían los sospechosos de planear esa toma ni los motivos que habrían tenido), por lo cual fletó a los miembros de la Comisión Política Nacional en autobuses que los llevaron del Auditorio Nacional a la sede del comité directivo del PRI en el estado de México, sin avisarles mayor cosa e impidiéndoles luego el uso de teléfonos celulares. Ablandamiento preventivo, por si hubiera alguna duda de quién o quiénes habrían de hacer valer las decisiones respecto a las listas tan mentadas: ¡Atlacomulco vive; el control sigue! Por lo pronto, los dos dirigentes formales del PRI irán a las cámaras. Enrique Ochoa Reza forma parte de la tecnocracia encumbrada con Peña (fue director de la Comisión Federal de Electricidad) pero, actualmente, está más cerca y es más dependiente del actual ocupante de Los Pinos que del candidato Meade. A Claudia Ruiz Massieu, sobrina de Carlos Salinas de Gortari, le preparan una salida tersa, encaminándola a presidir una comisión de asuntos de migrantes en el Senado. Otras estampas relevantes del nuevo PRI de antes, de la vestimenta distinta que arropará al desprovisto Meade: Miguel Ángel Osorio Chong, a quien han prometido que será el coordinador de los senadores priístas, sin que él mismo esté convencido de que le vayan a cumplir el ofrecimiento; Emilio Gamboa Patrón no seguirá siendo el jefe máximo del Senado, pero deja a su hijo Pablo, en compensación por no haber hecho candidato a gobernador de Yucatán a este júnior; Beatriz Paredes, la ex gobernadora de Tlaxcala de larguísima carrera de priísmo tradicional; Carolina Viggiano, esposa de Rubén Moreira, secretario de organización del PRI nacional y uno de los responsables de organizar un triunfo tricolor al estilo practicado por ese clan en Coahuila, además él mismo ya postulado para diputado federal; Eruviel Ávila, ex gobernador del estado de México y operador encargado de reproducir el esquema de fraude electoral realizado en esta entidad para imponer a Alfredo del Mazo, y Carlos Aceves del Olmo, dirigente de la Confederación de Trabajadores de México. Para la Cámara de Diputados, por la vía plurinominal, con Ochoa Reza como aspirante a coordinar la bancada priísta, se aprobaron, entre otras, las siguientes postulaciones: el jalisciense Arturo Zamora, dócil encargado del sector popular del PRI; Ismael Hernández Deras, encargado del sector campesino y manejador caciquil de la política priista en el enturbiado estado de Durango; Luis Miranda, el compadre de Peña Nieto que ha sido subsecretario de Gobernación y secretario de Desarrollo Social; Luis Vega, secretario de Finanzas del comité nacional priísta que ha sido pieza clave en la transferencia de recursos públicos a campañas electorales del Revolucionario Institucional, y los mexiquenses Ernesto Nemer y Ana Lilia Herrera”.

http://www.jornada.unam.mx/2018/03/19/opinion/008o1pol

Independientes tramposos

Leo Zuckermann escribe en Excélsior acerca del proceder tramposo de los precandidatos independientes a la presidencia de México: “Por tramposos, el Instituto Nacional Electoral negará el registro como candidatos presidenciales independientes a Jaime Rodríguez El Bronco y Armando Ríos Piter El Jaguar a pesar de haber recolectado más de las 866 mil firmas requeridas para aparecer en la boleta. Sólo Margarita Zavala obtendrá el registro y por un pelito. Varias cosas pueden decirse sobre este resultado. Primero, que los partidos se salieron con la suya. Efectivamente establecieron requisitos prácticamente imposibles de cumplir para aparecer en la boleta presidencial. De 48 ciudadanos que se inscribieron, sólo una logró cruzar la meta de firmas válidas con el uno por ciento del padrón en por lo menos 17 estados. El monopolio de los partidos para elegir a nuestros gobernantes se comportó como tal, es decir, protegiendo su monopolio imponiendo barreras muy altas, prácticamente imposibles de superar, para nuevos entrantes en la competencia. Siendo el proceso tan difícil de lograr, por lo menos dos de los aspirantes independientes acabaron comportándose igual que los partidos, es decir, tratando de ganar con trampas. El Bronco y El Jaguar quisieron hacerse pasar por algo diferente y acabaron siendo algo común y corriente: embusteros de la política. Vaya decepción. El reporte del INE sobre las firmas no deja dudas al respecto. Hay errores que parecen de buena fe (por ejemplo, que un elector haya sido dado de baja por el Registro Federal Electoral) y otros, francamente fraudulentos. De todas las firmas que presentó Jaime Rodríguez (más de dos millones), casi el 8% fue simulaciones (158 mil). Pero el que se voló la barda fue Ríos Piter: casi el 46% de las firmas presentadas a la autoridad electoral resultaron simulaciones, más de 800 mil firmas fingidas. Vale la pena destacar que Margarita prácticamente no presentó simulaciones (sólo 432 de más de un millón y medio). En fin, que quisieron aparecer como algo diferente al corrupto sistema de partidos y acabaron siendo igual o peor que ellos. ¿Cómo llegaron a esta situación? Presiento que cayeron en la misma trampa en la que los partidos han tropezado desde hace mucho tiempo: el canto de las sirenas de los “operadores electorales de tierra”. Bribones que prometen el oro y el moro a los candidatos a cambio de mucho dinero. Estafadores que dizque cuentan con una “tecnología probada” para conseguir votos. No me sorprendería que tanto El Bronco como El Jaguar hayan contratado los servicios de estos operadores, quienes les habrían ofrecido las firmas a cambio de una buena suma de dinero. Y, como suele suceder en estos casos, los dejaron colgados de la brocha. Decía un viejo operador electoral del PRI, que llegó a ser gobernador de su estado, que “elección que no deja rancho no es elección”. Y se reía sin ningún pudor. Efectivamente, los susodichos “operadores” se quedan con la gran cantidad del dinero que reciben. Si su candidato gana, presumen de la gran “operación” que llevaron a cabo. Si el candidato pierde, pues no hay manera de reclamarles por haber incumplido con sus promesas. Ellos ya tienen “su rancho”. ¿Dónde quedaron, por ejemplo, los cientos de millones de pesos que dizque llegaron a la campaña de Francisco Labastida en 2000 vía Pemex? ¿O los múltiples desvíos de la Estafa Maestra o de la Sedesol o de la Sedatu este sexenio que presumiblemente habrían acabado en campañas del PRI que luego perdió este partido? ¿Cuánto de ese dinero se quedaron los “operadores”? A Rodríguez y Ríos Piter habría que preguntarles cuánto dinero pagaron por conseguir firmas que resultaron fraudulentas. ¿A quién se lo dieron? ¿Quiénes fueron los que se enriquecieron a sus costillas? En este asunto, por cierto, hay que felicitar al INE por haber hecho bien su chamba. Ellos están para aplicar la ley y eso hicieron. No se tentaron el corazón por razones de corrección política. Fraude es fraude y punto. Con el mismo criterio y determinación deberán juzgar a los candidatos partidistas. Para terminar, decir que no todos los candidatos independientes resultaron ser una decepción por tramposos. De los presidenciales, Margarita logró el registro. Pero hay otros 47 ciudadanos que aparecerán en distintas boletas al haber recabado el número de firmas válidas en otros puestos de elección popular con muchos menos errores, inconsistencias y simulaciones que los presidenciales. El más limpio de todos, Pedro Kumamoto, candidato al Senado por Jalisco, quien logró que el INE le validara más del 95% de las firmas que presentó. Esos casos son los que dan esperanza sobre el valor de los candidatos independientes en una democracia monopolizada por los partidos.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/leo-zuckermann/2018/03/19/1227157

Las contradicciones de AMLO

Otro análisis de AMLO es realizado en El Universal, por el periodista Ricardo Raphael, quien escribe que: “para ganar la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador debe traspasar su techo de cristal, pero difícilmente podrá lograrlo sin antes resolver las contradicciones del suelo pegajoso que le tienen anclado. Desde la primera vez que contendió como candidato para la jefatura del Estado mexicano, López Obrador consolidó una preferencia electoral que ronda el 33 por ciento de los votos. Ese es su capital político: un tercio de la población adulta que lo apoya desde hace doce años Sin embargo, en ninguna de las ocasiones anteriores le alcanzó tal respaldo para triunfar […]. Este es el desafío que en 2018 deberá resolver el candidato de Morena: romper el techo de cristal que las otras dos veces lo contuvo. Son dos trabes las que sostienen a ese techo, una geográfica y la otra sociológica. Revisando la geografía resulta evidente que el apoyo lopezobradorista se vuelve discontinuo a partir del paralelo 20; de Querétaro hacia el norte, el político tabasqueño cuenta con menos simpatías […]. Tan consciente está de este hecho que López Obrador decidió, para esta ocasión, hacer una alianza explícita con la geografía ajena […]. Es a partir de esta misma falencia que debe leerse la sociedad estratégica entre López Obrador y el empresario neolonés, Alfonso Romo. Si bien Romo es un capitán de empresa distinto a muchos otros, se trata de un hombre que conoce bien a los capitales mexicanos y por eso su tarea principal ha sido tranquilizarlos. La otra trabe que sostiene al mismo techo de cristal es sociológica […]. Funcionó bien la campaña que lo acusó de ser un peligro para ese sector social, que no solo se define por su nivel de ingreso, sino también por sus aspiraciones y construcción identitaria. Esta vez López Obrador se esmera por no infundir temor entre ese preciso estrato social, el cual le es indispensable si es que quiere conseguir el triunfo en julio próximo. Candidaturas como la de Gabriela Cuevas o Germán Martínez, e inclusiones en su eventual gabinete, como la de Esteban Moctezuma y el propio Alfonso Romo, buscan justo remover ese otro obstáculo que anteriormente le impidió crecer. No obstante, los problemas de López Obrador van más allá del techo de cristal. Desde ya se asoma también como dilema el suelo pegajoso, es decir, la contradicción radical que lo tiene anclado al suelo de sus posibilidades. El suelo pegajoso de este candidato para el 2018 lo constituye la naturaleza polarizada de su oferta política. Los días previos dos personajes hicieron evidente ese suelo inconsistente: Paco Ignacio Taibo II y Alfonso Romo. Por más que digan caerse bien, esos dos mexicanos representan cabos muy apartados del espectro social mexicano”.

http://www.eluniversal.com.mx/columna/ricardo-raphael/nacion/las-contradicciones-de-amlo

Realista

La corrupción parece ser la principal preocupación de los candidatos presidenciales, por ello se han enfocado recientemente en hablar sobre las estrategias para combatirla en caso de llegar a Los Pinos. En el marco del registro del candidato del PRI en el Excélsior, su columna de trascendidos, Frentes Políticos, asegura que: “al registrar en el INE su candidatura presidencial de la coalición Todos por México, José Antonio Meade promete un horizonte amplio y promisorio para México; sería un error caer en posturas utópicas o demagógicas. Pidió a los partidos que lo postularon (PRI, PVEM y Nueva Alianza) trabajar para lanzar una iniciativa de ley que ponga fin al fuero, blindaje con el que se cometen innumerables actos de corrupción. Tampoco más prerrogativas, pues, como lo dijo el exsecretario de Hacienda, y con justa razón, el único privilegio que nos debe mantener erguidos es ser mexicanos, no otro más, porque la ley debe estar por encima de todos. Su puesta en práctica acabaría con muchos males que tienen al país prácticamente contra la pared. Sólo queda esperar el 1 de julio”.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/frentes-politicos/2018/03/19/1227163

En tanto, sobre el registro de Meade en Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “si alguien está muy contento con José Antonio Meade es el partido Nueva Alianza, pues a su registro como candidato ante el Instituto Nacional Electoral fue el partido que más militantes convocó. Ni siquiera la maquinaria priista fue tan multitudinaria ni escandalosa como la turquesa”.

http://www.milenio.com/firmas/trascendio_nacional/Trascendio_18_1141865827.html

Confunden a Meade con AMLO en el INE

En tanto en El Universal, su columna de trascendidos Bajo Reserva, asegura que: “al dar a conocer la recepción de solicitud de registro de José Antonio Meade como candidato a la Presidencia de la República, el Instituto Nacional Electoral tuvo un resbalón. En un comunicado dijo que el ‘Consejero Electoral Benito Nacif, Presidente de la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos, enfatizó que con la entrega de la documentación por parte de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’, hoy se cumple con el plazo previsto en el acuerdo…’. El caso es que don José Antonio no es el candidato de esa coalición, el candidato es Andrés Manuel López Obrador, mientras que Meade es el abanderado de la coalición Todos por México. Más tarde el INE corrigió el error en su comunicado. Sin embargo, algunos priístas comentaron que en política no hay casualidades, y que ellos veían el error como una traición en subconsciente de quien hizo el boletín. Malo este hecho cuando ha habido sugerencias de que el Instituto ha dado color de a quién le gustaría ver en la Presidencia, y a quién no. Si fue una equivocación, alguien pagará por el error”.

http://www.eluniversal.com.mx/columna/periodistas-el-universal/nacion/confunde-el-ine-meade-con-amlo

El solo “canto” de “El Jona”

En días pasados se dio a conocer la aprehensión de uno de los principales involucrados en el secuestro de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, el caso volvió a ponerse en el centro de la polémica, sobre todo porque se trata de un hecho que podría reforzar la versión de lo ocurrido conocida como “la verdad histórica. Al respecto e Milenio, el periodista Carlos Marín, escribe que: “aunque abundan personas injustamente encarceladas y muchas más que cometieron crímenes de poca monta pero se pasan años mezcladas con peligrosos delincuentes, no es el caso, desde luego, de la mayoría o todas las 34 del caso Iguala por las que aboga la oficina en México del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, a partir de la sospecha de que fueron torturadas. Ejemplo notable de ese enfoque (coincidente, aunque parezca descabellado, con la postura defensora de los asesinos de sus hijos adoptada por los padres de Los 43 y sus abogados) es el de una supuesta ‘víctima’ de verdugos del Ejército, la Marina, la PGR y la PF: Jonathan Osorio Cortés, alias ‘El Jona’. Si conocen el expediente, nadie de quienes abogan por el sicario puede ignorar la declaración ministerial, la pericial psicológica y la participación que tuvo en la reconstrucción de hechos en presencia de su abogado, donde consta que sin coacción alguna da su versión con detalles aterradores de la matanza que se cometió con los jóvenes que aún vivían y de la quema de sus cuerpos en el basurero de Cocula”.

http://www.milenio.com/firmas/carlos_marin/derechos_humanos-los_43-ejercito-jonathan_osorio_cortes-sicario-basurero_cocula_18_1141865819.html

Ayotzinapa, la ONU y la PGR

La normalización de la violencia en nuestro país, parece haber alcanzado a las autoridades, hecho que se ve reflejado en el trato que ha recibido el caso Ayotzinapa, pues en Milenio, el periodista Carlos Puig, escribe que: “en toda la discusión, los dimes y diretes, las verdades y mentiras históricas o legales, hay un hecho incontrovertible. Aquella noche de septiembre de 2014, elementos de la policía de Iguala montaron un operativo que duró varias horas para aprehender a un grupo de estudiantes a los que después entregaron al crimen organizado. De este operativo, en algún momento tuvieron conocimiento elementos del Ejército y la Policía Federal destacados en la ciudad. Entiendo que por los años que hemos vivido, por la normalización de la violencia, porque no esperamos nada de nuestros policías, se nos pueda escapar la gravedad del asunto: policías atrapando civiles para que sean asesinados por la delincuencia. Este asunto, de este tamaño, cayó después en un sistema de procuración de justicia deteriorado, laberíntico, ineficaz, cuya principal técnica de investigación es la obtención de confesiones como sea […]. Hemos interiorizado este desastre como la manera en que las cosas funcionan. Y, por eso, cada vez que alguna organización internacional, que unos ojos ajenos a nuestra realidad miran lo que ha sucedido no pueden dejar de asombrarse. Una muestra es el más reciente informe de la ONU: ‘El hecho de que la mayoría de las causas penales relacionadas con los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014 están radicadas en el Juzgado Primero de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales en Matamoros, Tamaulipas, genera importantes desafíos para el adecuado acceso a una defensa. Los defensores públicos que defienden a parte de los procesados en estas causas se encuentran, al igual que el juez, en la ciudad de Matamoros. Los procesados del caso Ayotzinapa se encuentran privados de libertad en cárceles federales en Jalisco, Morelos, Estado de México y Nayarit, entre otros. Al no tener los defensores públicos recursos para poder viajar a visitar a sus representados en sus respectivos centros de detención, los procesados solo han tenido acceso a sus defensores públicos mediante videoconferencias y por vía escrita’. Hoy no hay un solo sentenciado por aquella noche. Esto sucede en cientos y cientos de casos en México todos los días. A nadie le extraña. Y cada vez que el mundo le echa un ojo, se queda anonadado y la PGR sale a defender la atrofiada ‘normalidad’”.

http://www.milenio.com/firmas/carlos_puig/ayotzinapa-onu-pgr-ejercito-policia_federal-violencia-delincuencia-pgr_18_1141865826.html

2018: una elección gigante

Héctor Aguilar Camín escribe en Milenio acerca dl enorme proceso electoral que se viene: “Cuando se ve el tamaño de la elección que viene, uno duda de la inteligencia de haber concentrado tantos procesos en la misma jornada electoral. Nunca ha corrido hacia una misma fecha de elecciones tanta adrenalina, tanta diversidad regional, tantos candidatos que literalmente se juegan el pellejo, pues, para una proporción muy alta de ellos, perder las elecciones de este año puede ser sinónimo de perder la libertad, de ir a la cárcel. En un panorama de corrupción, como el que domina la República, la búsqueda de fuero mediante un cargo de elección es un motivo central, no tan oculto, de muchos de los contendientes. El año político de 2018 trae en la barriga una elección de la Presidencia de la República y del Congreso federal, 30 elecciones locales de presidentes municipales y diputados, y nueve gubernaturas. Puesto todo junto, contando desde síndicos municipales hasta presidente de la República, hablamos de una elección en la que se disputarán unos 18 mil cargos. ¿Cuántos candidatos saldrán a la batalla? Si se piensa que para cada cargo habrá al menos cuatro aspirantes, hablamos de 72 mil candidatos. El padrón electoral es de 88 millones, 8 más que hace seis años. Casi 13 millones de esos ciudadanos votarán este año por primera vez, en alguna de las 156 mil casillas que habrá en todo el país, manejadas por un millón y medio de ciudadanos sorteados al efecto. Las autoridades electorales deberán fiscalizar unos 140 informes de los partidos sobre sus gastos en campaña y resolver unos 50 mil juicios por denuncias de los actores. El INE, que concentrará sus esfuerzos en la elección federal (800 cargos en disputa) tendrá cinco semanas para fiscalizar los gastos de campaña. Y el tribunal electoral, solo unos 10 días para emitir sus sentencias definitivas. “¿Qué es lo que está haciendo el INE hoy de cara a las elecciones de 2018?”, se pregunta Lorenzo Córdova, presidente de ese instituto. Responde. “Preparándose para la tormenta perfecta”. Todo esto y mucho más puede leerse en las entrevistas de Saúl López Noriega al propio Córdova y a Janine Otálora, presidente del tribunal electoral, en la revista Nexos (http://bit.ly/2tVeUQe)”.

http://www.milenio.com/firmas/hector_aguilar_camin_dia-con-dia/elecciones-candidatos-presidencia-congreso_federal-ine-tribunal_electoral_18_1141865825.html

@loscabareteros