Columna de columnas nacional (07 dic 17)

Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del jueves 07 de diciembre de 2017. La amnistía que terminó en linchamiento: muchos gobernadores priistas “pactaron” con narcos de manera soterrada (y se hicieron multimillonarios en el proceso) para limitar los daños colaterales y evitar la guerra abierta entre bandas… Amnistía y violencia: López Obrador no se equivocó este 2 de diciembre en Chilapa, Guerrero, una de las zonas más afectadas por la violencia en el país… Ya montaron al Bronco “Fuerte y con Todo” desde el Edomex… El nuevo grupo de poder: despojar de una manera tan acelerada al PRI del PRI se está sintiendo como si el partido fuera lo que el año pasado su exlíder Manlio Fabio Beltrones llamó un “taxi” para candidaturas que recogieron delincuentes.

Rayuela

Dónde está la Profepa para impedir una construcción ilegal como la de Nayarit. ¿Para quién trabaja?

http://www.jornada.unam.mx/2017/12/07/

La amnistía que terminó en linchamiento

Jorge Zepeda Paterson escribe en El País sobre Andrés Manuel López Obrador, líder de la oposición en México, lo siguiente “acaba de demostrar por qué es el personaje público más amado y más odiado en el país. Su reciente propuesta sobre una posible amnistía a los miembros de los carteles del crimen organizado encendió la pradera, y con razón. Los capos del narco suelen ser el elefante rosa sobre el que los políticos prefieren no hablar. Mantienen al Ejército combatiendo a los criminales a pesar de que hace años que la estrategia demostró ser un fracaso: la inseguridad pública aumenta cada día y las regiones perdidas por el Estado a manos del crimen siguen ensanchándose. Pero los políticos actúan como si la guerra estuviese dando resultado, como si no la hubiésemos perdido hace tiempo. Peor aún, la ley de Seguridad Pública Interior en proceso de ser aprobada legaliza lo que en principio es una aberración: legitimar la guerra que los militares libran contra un ejército que en realidad es la población civil. López Obrador no detalló su propuesta de amnistía; lo estoy analizando, dijo, lo que puedo decir es “que no va a quedar ningún tema por ser abordado si se trata de garantizar la paz y la tranquilidad”. Y aunque claramente afirmó que tal medida, la amnistía, formaría parte de la transformación radical y urgente que requiere el sistema de justicia, sus adversarios lo han cosido a dentelladas a fuerza de sacarlo de contexto. José Antonio Meade, el candidato oficial, que acababa de declarar que México no iba a avanzar con viejas recetas económicas como las de López Obrador, criticó a su rival y apoyó implícitamente las viejas recetas de sus jefes (Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto) sobre combate al crimen organizado. Ricardo Anaya, el precandidato de la otra oposición, la de derecha, ha dicho no al continuismo, pero declaró que la propuesta de López Obrador es demencial. Por su parte, los ministros de Defensa y de Marina, que en principio no podrían participar en los debates preelectorales, lo han descalificado con la enjundia que no han mostrado en su combate a los carteles. No sé si la solución que ofrece López Obrador es viable o bajo qué condiciones podría serlo. Lo que sí es importante es que haya pensado “fuera de la caja” con respecto al cáncer galopante que nos aqueja. Justamente la metástasis que sufrimos obedece al hecho de que los políticos decidieron ignorar el tema. Lo que si es demencial es seguir descabezando organizaciones criminales para fragmentarlos en bandas incontenibles cada vez más salvajes y brutales. Una amnistía es en última instancia una propuesta orgánica y estructurada de aquello que muchos gobernadores priistas hicieron a lo largo de los años de manera soterrada (y se hicieron multimillonarios en el proceso): pactar con un cartel para limitar los daños colaterales y evitar la guerra abierta entre bandas. Y si me apuran, algo no muy diferente de lo que hace el Gobierno estadounidense desde hace mucho tiempo: tolerar el trasiego de drogas desde la frontera hasta sus ciudades y las cadenas de distribución al menudeo para responder a la demanda insaciable de parte de sus ciudadanos. López Obrador no puede evitar que el consumo en estos mercados (en Estados Unidos y en México) hagan rentable la producción y circulación de drogas, ni que los campesinos y los laboratorios clandestinos las produzcan. Y tampoco lo ha logrado el Ejército, eso está claro. Lo que intenta es buscar fórmulas que permitan mitigar el terrible impacto que ese fenómeno se cobra en materia de vidas, podredumbre y miseria. ¿Demencial proponer una amnistía a los capos a cambio de que nos ayuden a pacificar y acotar a los carteles? No sé. Lo que si es demencial es seguir descabezando organizaciones criminales para fragmentarlas en bandas incontenibles cada vez más salvajes y brutales.

https://elpais.com/internacional/2017/12/06/mexico/1512600956_299654.html

Amnistía y violencia

Sobre la declaraciones de Andrés Manuel López Obrador sobre analizar una amnistía a líderes criminales se ha escrito mucho, y aunque se pensó que había cometido un error al declararlo, Obrador piensa en realidad en un diálogo con los criminales para poder tener un poco de paz, situación que hoy es imposible ante la gran cantidad de grupos delincuenciales que existen en el país, y sobre este tema, en el Reforma, el analista y periodista Sergio Sarmiento, escribe que: “hubo quien dijo que Andrés Manuel López Obrador se había equivocado, que en la confusión de un chacaleo respondió sin pensar a la pregunta de un reportero: ‘Vamos a hacer todo lo que se pueda para que logremos la paz en todo el país, que no haya violencia. Si es necesario, vamos a convocar a un diálogo para que se otorgue amnistía, siempre y cuando se cuente con el respaldo de las víctimas, de los familiares de las víctimas’. Pero López Obrador no se equivocó este 2 de diciembre en Chilapa, Guerrero, una de las zonas más afectadas por la violencia en el país. Quizá no está comprometido con una amnistía, pero sí está considerando la posibilidad de un diálogo y un perdón. […]. Hay buenas razones para cuestionar un diálogo con los líderes del crimen organizado y la posibilidad de otorgarles una amnistía. Hubo un tiempo, cuando había un verdadero cártel, el de Guadalajara, en el que quizá se podría haber negociado con un capo o con un grupo relativamente pequeño de líderes del crimen. Hoy, después de décadas de guerra contra las drogas, la hidra tiene ya cientos o miles de cabezas. ¿Cómo escoger con quién negociar? La respuesta de López Obrador a los cuestionamientos de los secretarios de Defensa y Marina sugiere que, lejos de haberse equivocado, él cree realmente en dialogar con los líderes del crimen. […]. Sería imposible, es verdad, negociar con miles de criminales a la vez. Los delitos que más duelen no los cometen las grandes bandas del narcotráfico sino grupos relativamente pequeños de delincuentes. López Obrador, sin embargo, ha entendido la exasperación de la población ante una inseguridad que no ha hecho más que aumentar en los últimos años, a pesar de que el gobierno ha gastado cantidades crecientes de dinero para fortalecer a las policías, las procuradurías y las Fuerzas Armadas. Una vez más Andrés Manuel está estableciendo la agenda de fondo en un proceso electoral. El problema de la inseguridad no tiene soluciones fáciles. López Obrador señala en su Proyecto de Nación 2018-2024 que la inseguridad es producto del desempleo, la pobreza y la desintegración familiar. Esta idea, de que los pobres son los responsables del crimen, no es avalada por la información. Es falso que los pobres sean más proclives a cometer delitos. La información disponible sugiere que la mayoría de los criminales pertenecen a la clase media y no a los grupos más pobres. […]. La estrategia de utilizar la represión para reducir el consumo de las drogas, sin embargo, no ha disminuido su uso, aunque sí ha provocado una dramática explosión de violencia. Quizá la solución no radica en reglamentar el uso del Ejército como policía, como lo hace la Ley de Seguridad Interior, ni en otorgar amnistías a los principales criminales. Una medida más sencilla, y más eficaz, sería legalizar las drogas y usar a la policía para combatir los crímenes con víctima”.

http://www.reforma.com/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?id=125217&urlredirect=http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=125217

Ya montaron al Bronco

De cara a las próximas elecciones presidenciales, que se prevé sean las más reñidas en la historia de México, se hacen todos los cálculos y alianzas posibles con tal de incrementar las posibilidades de ganar de cada partido, y eso mismo han hecho el Partido Revolucionario Institucional y Jaime Rodríguez Calderón, también conocido como “El Bronco”, pues, entre ellos se llegó a un acuerdo para que en las próximas elecciones quite la mayor cantidad de votos a López Obrador mientras que de parte del Partido Revolucionario Institucional y del gobierno federal, Nuevo León va a recibir trato preferencial en muchos aspectos, y de esto, en El Universal, el periodista Salvador García Soto, escribe que: “Jaime Ramírez El Bronco pasó de ‘independiente’ a ‘codependiente’ de Los Pinos. El Gobernador de Nuevo León, que hizo historia en 2015 al ser el primero en ganar una gubernatura como candidato sin partido en la historia democrática del país, terminó entregándose a los brazos del Presidente Peña Nieto y del Partido Revolucionario Institucional, partido en el que militó toda su vida hasta que la negativa de una candidatura lo empujó a explorar la vía independiente en la que, con el padrinazgo financiero de empresarios regios y hasta del narcofiscal de Nayarit, Edgar Veytia, preso en Estados Unidos por narcotráfico, se convirtió en un fenómeno político y electoral gracias a su manejo de las redes sociales. […]. Hoy al gobernador de Nuevo León de Bronco ya nomás le quedó el nombre, porque no sólo se mueve, en su nueva aspiración presidencial como ‘independiente’, como parte del sistema político y aprovechando los recursos públicos que le da su cargo, sino que además hay señales claras de que Jaime Rodríguez pactó con el gobierno federal que apoyaran y alentaran su candidatura, a cambio de que él se concentrara en campaña en un sólo objetivo […]: quitarle el mayor número de votos posibles a Andrés Manuel López Obrador. Ese es el único objetivo y misión real del Bronco que se dejó montar por Los Pinos: dividir y fragmentar el voto ciudadano, sobre todo de los inconformes y los antisistémicos que ven en López Obrador una opción de cambio. En la medida que más se fragmente el voto antipriísta y antisistema […] baja el porcentaje de votación necesario para ganar la elección presidencial y eso favorece al Partido Revolucionario Institucional porque sigue siendo el partido con el mayor voto duro y estructura a nivel nacional. […]. Pero eso no es todo, la negociación de Jaime Rodríguez con Los Pinos incluye un trato ‘especial’ a su estado por parte de Hacienda, que de unos meses para acá ha enviado con prestancia y celeridad todas las partidas y recursos federales asignados al estado, cuando muchas otras entidades se quejan de atrasos y lentitud en la entrega de los recursos que les corresponden desde el centro. […]. Así que ya no hay duda de dos cosas: Jaime Rodríguez estará en la boleta de 2018 como candidato ‘independiente’, y al Bronco ya lo montaron y le pusieron un herraje que dice: ‘este cuaco es de la cuadra de Los Pinos’”.

http://www.eluniversal.com.mx/columna/salvador-garcia-soto/nacion/ya-montaron-al-bronco

Guardia Nacional

De acuerdo con el Diccionario Jurídico Temático de Derecho Constitucional (1997), de Elisur Arteaga Nava, la Guardia Nacional, de la que habla Andrés Manuel López Obrador ya existe, pero no se implementa, y en caso de ser necesaria su integración, la Guardia Nacional debería estar integrada por la sociedad civil, y no por las fuerzas armadas o policías estatales o municipales, como lo propone López Obrador: “la propuesta de Andrés Manuel López Obrador de otorgar una ‘amnistía’ a delincuentes ha concentrado la mayor parte del análisis y las críticas hacia sus propuestas en materia de seguridad. Sin embargo, la intención del actual puntero en las encuestas de la elección presidencial de constituir una Guardia Nacional debiera merecer también atención y discusión. […]. Después de decir que ‘sí existe el mando único’ y que él, como comandante de las Fuerzas Armadas, ejercería ese mando sin delegar funciones, el virtual candidato de Morena afirma que, si gana la Presidencia, va a crear la Guardia Nacional. Afirma: ‘Vamos a integrar a las corporaciones policiacas, a la Marina y al Ejército. Va a haber una Guardia Nacional. Ahora es un desastre porque cada corporación hace lo que considera… (En adelante) no va a ser así. Va a haber una Guardia Nacional, porque son 240 mil soldados y 50 mil marinos. Estamos hablando de una fuerza de 300 mil elementos, más las policías estatales y municipales. […]. Agrega: ‘Por eso estoy hablando de la Guardia Nacional. Y no se necesita una reforma constitucional porque ya está establecido desde hace muchos años en la Constitución que el Presidente puede constituir, crear una Guardia Nacional. […]. ¿Pero qué es exactamente la Guardia Nacional, entidad que es mencionada en ocho ocasiones (artículos 10, 31, 34, 36, 73, 76, 78 y 89) en la Constitución de 1917? De acuerdo con el Diccionario Jurídico Temático de Derecho Constitucional (1997), de Elisur Arteaga Nava, la Guardia Nacional es ‘un instituto armado formado por ciudadanos civiles, que levanta, organiza y reglamenta el Congreso de la Unión; sus jefes y oficiales son electos por quienes son miembros de él; su instrucción y disciplina son responsabilidad de los gobernadores de los estados […]. Añade: ‘La Guardia Nacional de un estado está bajo las órdenes del gobernador; pero cuando el Presidente de la República se encuentra dentro de un estado, ella pasa a depender de él en forma exclusiva […]. Para que dicho funcionario (el Presidente) pueda disponer de ella fuera del territorio de su estado, se requiere del consentimiento del Senado o de la Comisión Permanente’. […]. De acuerdo con esa explicación, la Guardia Nacional que existe de iure en la Constitución, más no de facto, poco tiene que ver con el planteamiento de coordinación en materia de seguridad que hace López Obrador en su video. No puede ser creada por el Ejecutivo. […]. Un eventual presidente López Obrador sólo podría tener mando sobre ella en la entidad federativa donde él estuviese, a menos de que el Senado autorizara otra cosa. Ah, y no tiene ley reglamentaria. Sería bueno saber si el principal planteamiento de López Obrador para hacer frente a la inseguridad se debe a un desconocimiento de lo que dice la Constitución sobre la Guardia Nacional o se hizo a pesar de lo que ahí está escrito”.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/pascal-beltran-del-rio/2017/12/07/1206182

Seguridad y punto a favor de AMLO

En medio de las polémicas declaraciones de Andrés Manuel López Obrador sobre analizar la amnistía para criminales y la probable aprobación de la Ley de Seguridad Interior, el mismo López Obrador ha mencionado la en varias ocasiones lo de la Guardia Nacional, que en caso de que se reinstaurara, no sería tan complicado el tema de seguridad, siempre y cuando cada gobernador se responsabilizara de la seguridad en sus estados, y de esto, hoy en Milenio, el periodista Carlos Marín, escribe que: “en la nueva retahíla contra las fuerzas armadas que tanto ha agraviado al Ejército y a la Marina Armada […], Andrés Manuel López Obrador ha reiterado dos palabras que merecen la mayor atención: Guardia Nacional. La actuación de las tropas en el combate al crimen organizado procede, simplemente, por la incapacidad y falta de voluntad política de la mayoría de gobernadores para cumplir con su responsabilidad frente a delitos del fuero común […] cometidos por las narcopandillas. Aunque se alegue que la cuestionada ley de seguridad interior ‘es inconstitucional’, solo es parte de la seguridad nacional que todo país debe garantizar, pero no habría debate si se reinstaurara la Guardia Nacional […] con el mando del gobernador que la invoque. Sería un paso intermedio a la utilización de las fuerzas armadas”.

http://www.milenio.com/firmas/carlos_marin/seguridad-punto-favor-amlo-guardia_nacional-milenio_18_1080671957.html

¿Seguridad de qué?

En días recientes se ha hablado de la Ley de Seguridad Interior y la propuesta de analizar la amnistía a criminales, por parte de Andrés Manuel López Obrador, y a decir verdad ambas propuestas son polémicas: “llegó un momento en que los cuerpos policiacos no pudieron hacer frente a la violencia que azotaba en algunas partes del país. La famosa guerra contra el narco fue ‘declarada’ porque las instituciones debieron actuar para combatir a una industria que no sólo se dedicaba al narcotráfico y su menudeo, comenzó a secuestrar, extorsionar y, claro, asesinar. La violencia era de varios tipos. Entonces salieron las Fuerzas Armadas para auxiliar a las policías locales en la tarea de brindar seguridad. Han pasado diez años. La violencia continúa siendo el gran pendiente. […]. Aunque irresponsable también ha sido, es, la propuesta que se aprobó la semana pasada en la Cámara de Diputados y que hoy seguirá su camino en manos de los senadores, la Ley de Seguridad Interior. En marzo pasado, el Secretario de Marina, Vidal Soberón, declaró: ‘Garantizar la seguridad es un principio ineludible del Estado mexicano, un principio con el cual el Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada de México hemos sido convocadas a participar en labores de seguridad pública, ello, hay que decirlo, debido a que en muchos de los casos los cuerpos de policía se han visto rebasados…’. Fue una decisión de emergencia. […]. México siempre ha sido un país que respeta y escucha a los órganos internacionales. Incluso es parte activa de coyunturas como la de Venezuela, en la que se aboga por las garantías de los ciudadanos. Éste debería ser uno de esos momentos en los que se sienta y escucha. La Organización de las Naciones Unidas envió una serie de recomendaciones, 14 temas que le preocupan sobre lo que hoy se discute en el Senado. El más importante, la ambigüedad que parece ser marca de todas nuestras leyes. Y es que en esta ley se escribe que el Presidente de la República podrá ordenar una intervención del Ejército y la Marina en zonas de conflicto; esto cuando se ‘identifiquen’ amenazas a la seguridad interior. […]. Si bien hay puntos claros, como que las manifestaciones político-electorales que se llevan a cabo de forma pacífica no se considerarán como amenazas a la seguridad interior, lo cierto es que la ley no tiene la precisión que requiere un tema tan delicado como lo es el uso de las Fuerzas Armadas. […]. La Ley de Seguridad Interior es una salida fácil que no contribuye al respeto de los derechos humanos, porque éstos quedan a expensas de un entendimiento unilateral, lo que no contribuye al mejoramiento de un entorno que se sabe delicado y sumamente herido por las condiciones de seguridad que se viven. […]. Lo mejor sería una iniciativa de ley que ordene un replanteamiento de los cuerpos policiales y su funcionamiento, que mejore las condiciones para el cumplimiento de su deber, que dé las herramientas teóricas y prácticas para enfrentarse con los grupos criminales y delincuentes que perpetran delitos del fuero común […]. En los sismos de septiembre vimos a las Fuerzas Armadas dedicadas y tendiendo la mano a los damnificados. Así se construye su imagen frente a los ciudadanos. Así se nos dice que contamos con un Ejército y Marina como nuestros aliados. De ninguna otra manera”.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/yuriria-sierra/2017/12/07/1206197

Nuño: la sombra de Salinas (y de Zedillo)

En La Jornada, el periodista Julio Hernández López, escribe sobre los últimos movimientos al interior del gabinete presidencial, en especial a Aurelio Nuño, quien deja de ser Secretario de Educación y se dedicará ahora a trabajar en la campaña presidencial de José Antonio Meade: “el mensaje que ha enviado Enrique Peña Nieto, mediante los movimientos que autorizó a Aurelio Nuño Mayer y a Otto Granados Roldán, evocan las circunstancias difíciles del arranque de la candidatura presidencial de Luis Donaldo Colosio, las pretensiones de maximato de Carlos Salinas de Gortari y la colocación desde Los Pinos de una cuña en el desarrollo de la campaña priísta de 1994 a través de Ernesto Zedillo, proveniente de la Secretaría de Educación Pública, luego candidato en relevo del ejecutado Colosio y posteriormente distanciado al extremo del propio Salinas de Gortari, éste siempre de ánimos controladores. Nuño Mayer y José Antonio Meade Kuribreña provienen de una misma matriz tecnocrática cuyo jefe ha sido Luis Videgaray Caso. Pero Nuño optó por asirse abiertamente al propio Peña Nieto y validarse a título individual como una especie de ejecutor jactancioso, incluso fanfarrón, de las instrucciones y deseos del mexiquense que ocupa Los Pinos. […]. Ahora, Nuño […] será el contralor designado por Peña Nieto para supervisar la marcha de la campaña de un candidato sin partido, Pepe Toño Meade, que ha ido haciendo esfuerzos grotescos por ganarse la benevolencia del gran dinosaurio priísta […] y por agradar al máximo al Gran Dedo Elector, prometiendo fidelidad y multiplicando elogios que no se compaginan con las pésimas cifras de Peña Nieto en encuestas de opinión sobre su desempeño como gobernante. Meade parece un rehén de las estructuras partidistas corporativas, de los intereses empresariales y financieros y de los eventuales arrebatos de un aspirante a jefe transexenal que parece dispuesto a manejar con cuanta rudeza crea necesaria el curso de la campaña electoral y de la imposición de resultados. Nuño, en ese proceso que apunta para ser tempestuoso, podría ser el vigilante, el enlace, el comisionado y, de ser necesario, un contrapeso político y, eventualmente, un relevo electoral […]. A esas y otras especulaciones ha abonado el hecho de que el relevo de Nuño en Educación Pública sea un salinista sin atenuantes, el citado Otto Granados, que fue poderoso coordinador de comunicación social en un tramo del gobierno de Carlos Salinas de Gortari, luego gobernador de Aguascalientes y embajador en Chile, entre otros cargos. El concuño de Salinas, José Antonio González Anaya, ha estado a cargo del gran negocio del Seguro Social, del descomunal negocio de Petróleos Mexicanos y ahora es secretario de hacienda, habiendo dejado a un subordinado al frente de Pemex. […]. En ese contexto, con esas cuotas vigentes para el salinismo, pareciera rudeza innecesaria añadirle a Meade un toque del Villano Favorito no sólo al colocar a Nuño como coordinador de campaña […] sino, incluso, dejando Educación Pública para el subsecretario salinista recuperado, Otto Granado. […]”.

http://lajornadasanluis.com.mx/opinion/astillero-nuno-la-sombra-de-salinas-y-de-zedillo/

El nuevo grupo de poder

Raymundo Rivapalacio escribe sobre la reconfiguración del PRI con Videgaray y Meade: “El nuevo ajuste de gabinete dado a conocer en Los Pinos, va más allá de preparar la campaña presidencial. Es el segundo relevo donde la influencia de la dupla de Luis Videgaray, el todavía muy poderoso secretario de Relaciones Exteriores, y José Antonio Meade, el virtual candidato del PRI a la Presidencia, mostró lo que, desde el último tramo del sexenio del presidente Enrique Peña Nieto, empezaron a construir: el nuevo grupo de poder dentro del partido en el gobierno, tecnócrata, mayoritariamente apartidista y con clara inclinación a despojarse de los históricos lastres tricolores y las manchas de corrupción. Peña Nieto no tuvo que esperar al resultado de la elección presidencial para ver el relevo del mando, y por una muy probable decisión propia está entregando el poder de facto a este nuevo grupo. (…) Ese grupo se formó en los años del ITAM, y sólo existe analogía con el equipo compacto que formaron en la Facultad de Economía, de la UNAM, los compañeros de salón en un proyecto piloto para estudiantes avanzados, que por sus características socioeconómicas llamaban Los Toficos, por los chiclosos que en sus comerciales remataban con la frase: “¡uy qué ricos!”, que encabezaban Carlos Salinas, Manuel Camacho y Emilio Lozoya Thalmann –padre del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya Austin. Ellos tres se comprometieron a luchar por la Presidencia para uno de ellos. No se conoce pacto similar entre Videgaray y Meade, pero el respaldo recíproco en diferentes momentos ha sido de apoyo, protección y comportamiento de equipo, como el del trío de antaño. (…) Despojar de una manera tan acelerada al PRI del PRI se está sintiendo como si el partido fuera lo que el año pasado su exlíder Manlio Fabio Beltrones llamó un “taxi” para candidaturas que recogieron delincuentes. Lo que se percibe es más grave que lo advertido. Toda una estructura puesta al servicio de no apartidistas, para un nuevo grupo que, de mantener el poder, probablemente lo primero que haga es deshacerse de los remanentes tricolores. Todo esto tiene que ver con un punto de alta relevancia: la cohesión en el partido. Si unidos la contienda es cuesta arriba, desunidos, 2006 será una broma comparada con 2018. Las fisuras en el PRI ante el advenimiento de este grupo ya están y podrán convertirse rápidamente en fracturas.

http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/el-nuevo-grupo-de-poder.html

El alfil

En el Excélsior, su columna de trascendidos, Frentes Políticos, nos hablan sobre uno de los colaboradores más cercanos a Ricardo Anaya, quien es el encargado de diseñar parte de la estrategia para el líder del Partido Acción Nacional: “parte primordial de lo que sucede al interior de Acción Nacional tiene que ver con la opinión de Jorge Buendía. Y, con relación al Frente Ciudadano, destacó que es importante que ya quede claro quiénes van a aspirar dentro de cada partido, porque la cobertura se empieza a ir hacia otros actores. Quien lleva el pulso de la opinión pública para Ricardo Anaya es Buendía. Sus mediciones y recomendaciones han sido fundamentales para el diseño de la estrategia de Anaya y, por supuesto, para posicionarlo como líder en las discusiones que han llevado al límite la viabilidad del Frente. Si alguien sabe de números y tendencias es él. Y afirma que el Partido Revolucionario Institucional no ocupa segundo lugar; que Margarita se desinfla sin el Partido Acción Nacional y que Anaya es más competitivo que Mancera. Lo dice uno de los colaboradores y voceros más eficaces del líder blanquiazul. ¡Ojo!”.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/frentes-politicos

Mancera, cada día más lejos y más cerca

Desde días atrás se ha hablado del riesgo de que el Frente Ciudadano por México no logre consolidarse, simplemente porque no logran llegar a un acuerdo en el método de selección de candidato a pesar de que el Partido Acción Nacional y Movimiento Ciudadano quieren que el candidato presidencial sea del blanquiazul. En Milenio, el periodista Joaquín López Dóriga, escribe que: “yo no creo que solo el protagonismo de Dante Delgado Rannauro haya sido el que puso el ultimátum a Miguel Mancera, porque veo al dueño de Movimiento Ciudadano al servicio de Ricardo Anaya y no del jefe del Gobierno. Me refiero a la declaración que hizo al día siguiente de que el Partido de la Revolución Democrática, sus gobernadores y tribus, se pronunciaran a favor de Mancera como su candidato presidencial, en el sentido de que en el Frente, su candidato era Ricardo Anaya, para el gobierno capitalino Alejandra Barrales y que el jefe de Gobierno sería senador, cuando por ley, lo marca la Constitución, no puede al igual que los gobernadores. […]. Pero no fue lejos Delgado Rannauro por la respuesta, la encontró en el segundo círculo, el Partido de la Revolución Democrática, que le recriminó el tonito, y el mismo Mancera que apenas llegó le reviró que los planteamientos tienen que ser del Frente, no de uno de sus integrantes, el más débil. Y añadió: Y, en dado caso, el acompañamiento lo tengo con el Partido de la Revolución Democrática. Estar futureando así, no le veo mucho sentido. Yo creo que, por ejemplo, Dante sería un buen secretario de Agricultura, le respondió con sarcasmo a quien a nombre de nadie, bueno, de Anaya, lo había eliminado de la candidatura presidencial del Frente mandándolo a un destino para él inconstitucional: el Senado de la República y sin consultarle. […]. Esta declaración viene a confirmar algo de lo que he venido señalando sobre el Frente y que solo Anaya y los suyos se niegan a reconocer, que ahí va, como el tango, cuesta abajo en su caída. Por eso cada día veo a Mancera más lejos del Frente y más cerca del Partido de la Revolución Democrática”.

http://www.milenio.com/firmas/joaquin_lopez-doriga/mancera-lejos-frente_ciudadano-cerca-candidato-prd-milenio_18_1080671927.html

Ricardo Anaya “Bond”

El día de ayer se dio una reunión entre Ricardo Anaya, Presidente del Partido Acción Nacional y Miguel Ángel Mancera, Jefe de Gobierno, en la que se habló sobre la candidatura del Frente Ciudadano. En Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “que no pocos se fueron con la finta y creyeron que Bond, James Bond, filmaba otra película en el Centro Histórico cuando un motociclista con casco, chamarra especial y toda la cosa salió del edificio del Gobierno de Ciudad de México. Resulta que el desconocido huyendo a toda velocidad para evitar a la prensa era Ricardo Anaya, quien fue a entrevistarse con Miguel Ángel Mancera, con quien revisó el tema de la candidatura presidencial del Frente Ciudadano, cuyo registro se perfila para el próximo viernes con ambos políticos como aspirantes a encabezarlo”.

http://www.milenio.com/firmas/trascendio_nacional/james_bond-ricardo_anaya-reunion-mancera-frente-milenio_18_1080671923.html

El cerillo

En El Universal, el periodista Carlos Loret de Mola, escribe las declaraciones y decisiones que ha tomado Donald Trump desde que era candidato presidencial en Estados Unidos, muchas de ellas han sido criticadas por su carga racial y a veces incongruencia, pero la que tomó ayer, de acuerdo con analistas y especialistas en el tema, es la más arriesgada, reconocer a Jerusalén como capital de Israel es visto como una provocación mayor: “de todas las barbaridades que ha hecho Donald Trump desde que llegó a la Casa Blanca, sin duda ésta es la más peligrosa. Algunas de sus medidas apuntan a la crisis económica, muchos de sus tuits son racistas, varios decretos violan derechos humanos, no pocas posturas reflejan un estándar moral pobrísimo, un sinnúmero de sus argumentos no tienen base real (fake news) y en demasiados momentos ha sido pescado en incongruencias flagrantes. Pero reconocer a Jerusalén como capital de Israel es de todos sus hechos el peor porque puede desatar una guerra. Y por si fuera poco, en la región más volátil del mundo, cuya estabilidad es frágil y que a la menor provocación estalla. Esta no es una menor provocación. Es una mayor provocación. […].  Pero los católicos juegan poco políticamente comparados con la crujiente relación judíos-musulmanes. Y en el Muro de los Lamentos queda diáfano y sencillo: este gigantesco Muro, el sitio más sagrado para la religión judía, es parte de la pared exterior de la mezquita de Al-Aqsa, tercer sitio más sagrado para el Islam, pues su creencia marca que ahí ascendió Mahoma a los cielos. ¿A quién le corresponden esas piedras? ¿De quién es la estructura si es la misma, pero de un lado de la pared es judía y del otro lado musulmana? Sagrada por las dos caras. […]. En este tambo de gasolina, Donald J. Trump decidió arrojar un cerillo. Sin que nadie se lo pidiera, sin que se pueda ver ningún propósito estratégico detrás. Es tan absurdo que sólo hace pensar que Trump está empeñado en minar la fuerza, posición e influencia de Estados Unidos en el mundo. Todos los países relevantes en el escenario internacional se le fueron encima, se dijeron preocupados y/o marcaron distancia de la determinación. No se diga las naciones árabes. Bueno, hasta grupos de israelíes y judíos en su país y en el mundo están espantados por las consecuencias de tan locuaz decisión. Incomprensible por todos lados, se antoja deducir que hay en esta medida un elemento presente en todo lo que hace Trump: racismo. Puro y duro antiislamismo. […]”.

http://www.eluniversal.com.mx/columna/carlos-loret-de-mola/nacion/el-cerillo

@loscabareteros