Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del sábado 05 de agosto de 2017. Fotografía del fracaso ENPOL: la supuesta reforma penal consiste en un nuevo marco normativo que no ha generado los cambios que se propuso porque las capacidades institucionales de las policías, MPs y jueces son exactamente las mismas antes y después de la reforma. Coahuila: el desaseo y la pifia. El dilema del PRI: intentar repetir lo que se hizo en el Estado de México, o asumir de antemano la derrota y volcar soterradamente todos sus recursos y medios a favor del candidato del Frente Amplio…
Rayuela
Milpa Alta nos muestra que no sólo en Tláhuac sopla el viento.
http://www.jornada.unam.mx/2017/08/05/
Fotografía del fracaso
En Reforma, la académica Ana Laura Magaloni Kerpel, escribe sobre la primer encuesta que publica el INEGI sobre población privada de la libertad, a propósito de la crítica de Gobernadores, jueces y magistrados sobre el Nuevo Sistema de Justicia Penal: “Esta semana el INEGI hizo públicos los resultados de la primera Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (ENPOL 2016). Esta encuesta busca medir, entre otras cosas, la incidencia de la arbitrariedad y corrupción por parte de policías, MPs y jueces que padecieron los internos desde su arresto hasta su sentencia. La ENPOL aplicó la encuesta en todos los centros penitenciarios del país -municipales, estatales y federales- y tiene representatividad a nivel nacional y por entidad federativa. Nunca antes se había tenido una fotografía tan profunda y completa de la magnitud del fracaso que ha sido la supuesta implementación de la reforma penal en México. (…) La ENPOL revela que la arbitrariedad y corrupción no han cambiado sustantivamente de 2000 hasta la fecha. Por ejemplo, según esta encuesta, 40% de los internos fue detenido de forma ilegal; durante el arresto, 46% de los internos fue desvestido, 35% padeció asfixia y 19% toques eléctricos. Sólo 2 de cada 10 detenidos tuvieron un abogado durante el interrogatorio policiaco en la agencia del MP y 47% reporta que sufrió presiones para dar una versión distinta de los hechos. A pesar de toda esta arbitrariedad, el juez los vinculó a proceso y, a la fecha del levantamiento, 70% ya había sido sentenciado. Con respecto a los años de condena, una cuarta parte compurga una sentencia de entre 6 a 10 años y otra cuarta parte de 21 o más años. Además, uno de cada 10 internos está recluido por posesión de droga. Considerando que más de la mitad de los encuestados fueron arrestados cuando ya estaba en vigor el nuevo sistema penal, está claro que la reforma no tuvo el efecto esperado.(…) En realidad la reforma penal simplemente cambió las normas procesales sin impactar las viejas y arraigadas prácticas de intimidar, maltratar y torturar al detenido para poderlo acusar. Ese es el corazón del modelo de persecución criminal autoritario: armar acusaciones a la mala. Ello ha frenado la posibilidad de que las procuradurías desarrollen verdaderas capacidades investigativas en delitos complejos. Los gobernadores y el gobierno federal argumentan que la reforma penal es un obstáculo para la seguridad de los ciudadanos porque no existe prisión preventiva automática en casos de portación de armas. Es un diagnóstico tan superficial como equivocado. La realidad es que la supuesta reforma penal consiste en un nuevo marco normativo que no ha generado los cambios que se propuso porque las capacidades institucionales de las policías, MPs y jueces son exactamente las mismas antes y después de la reforma. Qué tragedia la miopía con la que la clase política entiende uno de los problemas más importantes del país.
http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=117615&po=3
Coahuila: el desaseo y la pifia
Eduardo Huchim, en Reforma, escribe sobre lo turbio y desaseado del proceso de impugnación de la elección en Coahuila: “Por el dinero público empleado ilegalmente en la campaña priista y por el rebase en el respectivo tope de gastos, entre otras irregularidades, la elección para gobernador de Coahuila debe ser anulada. Sin embargo, aun cuando la segunda de las causales de nulidad mencionadas ha sido acreditada, no es seguro que la anulación se materialice, porque el asunto está en manos de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), cuya actual integración no se ha caracterizado por una conducta imparcial y autónoma. Al determinar el rebase del tope de gastos de campaña por más de 5% y al haber entre primero y segundo lugares una diferencia menor al mismo porcentaje en la votación, el INE abrió la puerta para anular esos comicios, pero -como explicaré más adelante- también les dio al PRI y a su protector, el TEPJF, un pretexto para revocar el rebase y mantener el «triunfo» de Miguel Ángel Riquelme. El desaseo que acompañó a los comicios de gobernador en Coahuila parece haberse extendido a la etapa de fiscalización de los gastos de campaña. El manoseo de los resultados en la revisión de las finanzas partidarias ha dado lugar a confusiones, a marchas y contramarchas y a erratas voluminosas. Así, un rebase de 31% determinado por la Unidad Técnica de Fiscalización en el gasto del candidato priista, se redujo a 7.86%, en una ruta en que la nulidad esperada podría terminar en sólo una multa a la coalición encabezada por el PRI. En tanto, el exceso de gasto fijado inicialmente para el candidato panista Guillermo Anaya, también se redujo, de 26% a 4.56. (…) Por lo pronto, la noche del martes 25 de julio, horas después de que el PRI anunció su impugnación en conferencia de prensa de Enrique Ochoa, el INE señaló en un comunicado que acatará las resoluciones del TEPJF en materia de fiscalización. Parecería obvio que, si el Instituto tuviera la prueba de que las normas sí fueron publicadas en el DOF, lo habría señalado en su boletín nocturno. Inevitablemente queda una pregunta en el aire: ¿Se trató de una omisión por descuido o por algún otro motivo?
http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=117610&po=3
El dilema del PRI
En Reforma, el escritor Jorge Volpi, hace un breve análisis de lo que han significado el regreso del Partido Revolucionario Institucional a la silla presidencial mediante Enrique Peña Nieto, quienes al inicio del 2012 luego de regresar a la silla grande se sintieron invencibles, pero con el pasar de los años, y en específico tres casos, Ayotzinapa, la Casa Blanca y la visita de Donald Trump todavía como candidato presidencial, han visto como de desvanece la posibilidad de volver a ganar las elecciones presidenciales el siguiente año, y escribe que: “a su regreso al poder en 2012, […] los priistas se imaginaron, […] invencibles: imposible imaginar una gestión más desastrosa que la de Felipe Calderón y sus miles de muertos. Contaban, además, con un candidato joven, guapo, rodeado de una maquinaria electoral otra vez aceitada [] y con una situación económica más o menos estable. Ni en sus peores sueños los priistas pudieron sospechar que, cinco años más tarde, iban a verse sumidos en la ignominia, con menos posibilidades de ganar los comicios de 2018 que los del 2000. ¿Cómo pudieron hacerlo tan mal? Supongo que muchos de ellos se lo preguntan a diario al constatar su popularidad en las encuestas, las más bajas de cualquier Presidente latinoamericano en activo […]. Luego de un inicio esperanzador, que duró apenas unos meses […], vino la debacle. […]. Primera fase, Ayotzinapa. Hubo un instante, al inicio, en el cual Peña Nieto pudo haberse colocado del lado de las víctimas […] pero, en vez de ello, optó por proteger a cal y canto al Ejército con la opacidad propia del antiguo régimen. A los pocos días, el escándalo de la Casa Blanca terminó por hundir cualquier atisbo de prestigio que le quedase a su Presidencia. En un caso raro, la elección de Trump volvió a concederle a Peña Nieto la oportunidad de reivindicarse un poco, asumiendo una enérgica defensa de los migrantes mexicanos y oponiéndose frontalmente al Muro. De nuevo la ocasión se perdió y, empequeñecido, el Presidente prefirió defender a Trump en suelo mexicano. La retahíla de acusaciones de corrupción contra grandes figuras del régimen no hizo ya sino dejar claro que el priismo se comporta como una cleptocracia sólo dispuesta a proteger sus propios intereses. […]. Aun así, los priistas, al menos los más astutos, saben o intuyen que la posibilidad de ganar en 2018 es mínima. Por lo que se les plantea un dilema de ardua decisión […]. Se trata, para ellos, de elegir el mal menor. Con un objetivo central: impedir, a toda costa, la victoria de López Obrador. […]. Los priistas tienen, hoy, solo dos opciones. La primera es intentar repetir el Estado de México y que esa repartición a mansalva de recursos, fraudes en sitios inhóspitos o poco vigilados y, sobre todo, la dispersión del voto opositor, les conceda una mínima ventaja. Para lograr esta estrategia no solo requieren un candidato al menos pasable, sino dinamitar, por todos los medios, el Frente Amplio Partido Acción Nacional-Partido de la Revolución Democrática. La segunda opción es más desesperada, pero no menos viable para su meta principal. Asumir de antemano la derrota y volcar soterradamente todos sus recursos y medios a favor del candidato del Frente Amplio para asegurarse, al menos, la derrota de López Obrador. […].
http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=117614
El quinto año de Felipe Calderón
En el Excélsior, el periodista Francisco Garfías, habla sobre los registros que se tienen sobre violaciones a derechos humanos en la lucha contra el crimen organizado, donde comparando el año 2011, durante el periodo de Felipe Calderón con los registros del 2017, los números muestran una tendencia a la baja y escribe que: “mucho se ha hablado y documentado sobre violaciones a los derechos humanos en la lucha contra el crimen organizado. Es raro tener una buena noticia sobre ese espinoso tema que nos ha puesto varias veces en la vitrina del horror: Tlatlaya, Apatzingán y Rancho el Sol, en Michoacán. […]. Las estadísticas ilustran el avance que en ese tema se ha registrado en la Marina, el Ejército y la Policía Federal. Los números muestran que 2011 fue el año en que mayores quejas se registraron por violaciones a los derechos humanos cometidos por elementos de las Fuerzas Armadas y la Policía Federal. En ese quinto año de Felipe Calderón se registraron mil 680 quejas contra el Ejército; bajaron a 191 en lo que va de 2017. La misma tendencia en la Marina. De 491 hace seis años, bajó a 134 en el mismo periodo, la baja en la Policía Federal fue de 776 a 217. […]. Otro tema de la charla con el titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos fueron los migrantes. El ombudsman ya pidió la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por la situación que viven en Estados Unidos. Es cierto que el flujo de personas ha disminuido hacia el norte por las políticas de míster Trump. Pero también es cierto que las detenciones de los ilegales que no han cometido ningún delito se han incrementado considerablemente. […]. González Pérez retrocedió en el tiempo y citó un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de 2010. En el documento queda claramente expuesto que los gringos se pasan por el arco del triunfo los requisitos legales para hacer detenciones de migrantes sin papeles. El hombre no acaba de entender por qué los medios no destacaron nunca el contenido de ese documento, hoy más vigente que nunca. A la letra dice: “La detención es una medida desproporcionada en muchos casos, aun cuando no lo sea en la mayoría de ellos… otra preocupación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos es el impacto de la detención en el debido proceso, principalmente con relación al derecho a la representación legal que afecta directamente el derecho a solicitar la libertad, a fin de garantizar de la mejor manera el derecho a la representación legal”, dice el citado texto. […].
http://www.excelsior.com.mx/opinion/francisco-garfias/2017/08/05/1179758
¿Presidente o mártir?
En El Universal, el periodista Salvador García Soto, habla sobre el mensaje grabado del dirigente Morena, Andrés Manuel López Obrador, durante la visita que realizó a Chile en días recientes, pues dicho mensaje ha provocado la reacción tanto de quienes están a su favor como de sus críticos, y escribe que: “en su reciente visita a Chile, donde lo recibió por escasa media hora la Presidenta Michelle Bachelet en el Palacio de la Moneda, Andrés Manuel López Obrador aprovechó para visitar el ‘Salón Blanco de Allende’, donde se reproduce la oficina del mítico presidente chileno Salvador Allende. […]. Ahí, junto al cuadro del socialista que gobernó Chile, el dirigente de Morena grabó un video en el que confesó su admiración por ‘el ejemplo de Allende que marcó mi vida’ y lo llamó ‘apóstol de la democracia’. El video difundido en redes sociales provocó de inmediato reacciones en México, a donde iba dirigido. Críticos del tabasqueño cuestionaron que, al compararse con Allende, el aspirante presidencial se autoerigiera, […] en ‘apóstol de la democracia’, cuando en su trayectoria varias veces ha mandado ‘al diablo a las instituciones’; otros, […] vieron una ‘identificación histórica e ideológica’ con el gobernante que sentó las bases de la reconocida democracia chilena actual, y los más suspicaces quisieron encontrarle a la declaración de López Obrador un mensaje político más elaborado: al identificarse con el depuesto presidente chileno, a quien la CIA junto con una facción del Ejército de ese país le organizó un golpe de Estado, […]. El tema es que, al invocar la figura política de Salvador Allende, Andrés Manuel López Obrador también invoca, inevitablemente, el recuerdo de un presidente, sí popular, carismático y revolucionario en su momento, pero también un ‘mártir’ de la lucha democrática. Porque el gobierno y el proceso de reformas sociales y políticas de Allende fue objeto, primero de un bloqueo económico y político de Washington […] y luego de una conspiración golpista alentada y armada por la CIA estadounidense […], apoyada por empresarios y oligarcas chilenos, y ejecutada por el traidor de Augusto Pinochet, quien fuera de los generales de más confianza de Allende. […]. Hoy, en la antesala de una sucesión presidencial que se adivina tan competida como complicada en nuestro país, en la que hay incluso quienes ven una contienda ‘enrarecida’ por intentos orquestados de frenar ‘a como dé lugar’ a quien encabeza las encuestas, vale la pena preguntarle a Andrés Manuel López Obrador con cuál de los dos Allendes se identifica más, si con el gobernante o con el mártir, que al final son uno mismo. Y qué mensaje quiso mandar cuando, además de Allende, evocó también a Francisco I. Madero ‘nuestro apóstol’, ambos víctimas de un golpe militar, alentado por Estados Unidos, que los asesinó y los depuso del poder. ¿De qué hablaba López Obrador cuando se paró frente al retrato de Allende?”.
¿Por qué las prisas del TLCAN?
Jorge G. Castañeda escribe en El Financiero sobre la negociación del TLCA y las prisas por entablar pláticas departe del gobierno mexicano: “En los últimos días he platicado con varias personas muy inteligentes, muy bien informadas del curso de las negociaciones sobre el TLCAN y muy predispuestas a contar lo que piensan. A todas ellas les he hecho la misma pregunta para la cual no tengo respuesta, al no necesariamente contar con los atributos mencionados: ¿Cuál es la prisa del gobierno de México? El argumento ‘oficial’ más sensato y creíble que he escuchado involucra a lo que podríamos llamar la inestabilidad psicológica del presidente Trump. Invoca también la esperanza de utilizar las ansias del mismo individuo por lograr alguna victoria en su gestión presidencial que sea inminente y económica. La idea sería que si no terminan las negociaciones en un muy corto plazo –como se ha dicho, para fin de año– Trump es capaz de recurrir al capítulo de salida del tratado o de plantear exigencias desorbitadas que obligarían a México a invocar la misma cláusula. En cambio, es posible que su necesidad de entregar un triunfo a corto plazo lo llevaría a ceder en algunos puntos difícilmente aceptables para México y para Canadá. Acepto que el argumento es sincero, pero no me convence. No veo por qué Trump sería incapaz de cambiar de parecer, incluso después del famoso handshake de los tres mandatarios en torno a una negociación concluida. Tampoco comprendo por qué Trump le ofrecería a México concesiones mayores en noviembre que en mayo o junio, o a finales de 2018. Si esta es la razón de la prisa mexicana, es muy mala”.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/por-que-las-prisas-del-tlcan.html
“The Caracas-Tláhuac connection”
En Milenio, el periodista Hugo García Michel, hace una comparación entre el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro y el delegado en Tláhuac, Rigoberto Salgado, y no necesariamente por el clima de violencia que se ha vivido en ambos lugares, sino porque en ambos casos, los funcionarios gustan de integrar a algunos de sus familiares a la nómina, por eso escribe que: “¿cómo? ¿Hay una conexión entre lo que está sucediendo en Caracas y los recientes acontecimientos delictivos en Tláhuac? […]. La conexión a la que me refiero tiene que ver con una semejanza entre el sátrapa venezolano Nicolás Maduro y el delegado en Tláhuac Rigoberto Salgado: a ambos les encanta colocar parientes en la nómina. En el caso del funcionario morenista, […] durante su comparecencia ante la Asamblea Legislativa de Ciudad de México, salieron a relucir, en voz de diversos asambleístas que lo interrogaban, una gran cantidad de nombres de parientes suyos o del tristemente célebre Felipe Luna Pérez, ‘El Ojos’, que ostentan o han ostentado empleos dentro de la delegación tlahuacana. En el caso de Cristian Salgado, detenido el 27 de julio, resulta que es hijo de una hermana de ‘El Ojos’ y de un primo de don Rigoberto. […]. Frente a los cuestionamientos, el delegado se quejó porque, […] los datos sobre sus familiares y los de ‘El Ojos’ en la nómina de la demarcación deberían estar bajo resguardo de la Contraloría y no en manos de los asambleístas. Por lo que toca a Nicolás Maduro, […] resulta que su hijo, conocido como ‘Nicolasito’ […], es quien encabeza la lista de ‘constituyentes’ que fueron elegidos para la nueva y espuria Asamblea Nacional. Nico Jr., a sus escasos 27 años, ha sido protagonista de algunos escándalos y ha medrado del presupuesto con diversos cargos, como el de director de una escuela de cine que durante un año no existió. También la esposa de Maduro, Cilia Flores, la ‘Primera combatiente’, madrastra de Nicolasito y quien ha colocado a una cincuentena de parientes y amigos en puestos claves del gobierno, es flamante asambleísta constituyente. ‘El orgullo de mi nepotismo’, llamó el ex Presidente José López Portillo a su hijo. Don Pepe continúa teniendo seguidores”.
El Ojos buscaba expandirse en Querétaro
Continuando con el tema Tláhuac, en El Universal, su columna de trascendidos Bajo Reserva, hace mención de las intenciones de Felipe de Jesús Pérez Luna, alias “El Ojos” de expandir sus dominios a otras partes del país y asegura que: “después del operativo de la Marina en el que resultó abatido Felipe de Jesús Pérez Luna, El Ojos, jefe del grupo criminal que opera en la delegación Tláhuac, autoridades federales y locales detectaron indicios de que los tres restaurantes La Carreta del Pacífico, propiedad de la familia del delegado Rigoberto Salgado, podrían ser utilizados para lavado de dinero y como centros de reunión de funcionarios de la delegación y de la banda criminal. Pero los trabajos de inteligencia arrojaron un dato que puede ser más alarmante: El Ojos estaría buscando expandirse en Querétaro, donde Salgado montó dos sucursales de La Carreta del Pacífico en unos cuantos meses. Apenas se conoció la información de los negocios en tierras queretanas, publicada por El Universal, el gobierno estatal clausuró los negocios de la familia Salgado. Claro, las razones para la acción fueron de índole administrativa. Bueno…”.
Deslinde fallido
Por su parte, en el Excélsior, su columna de trascendidos, Frentes Políticos, habla de las intenciones de los mototaxistas de deslindarse de cualquier vínculo que pudieran tener con “El Ojos” ahora que las investigaciones avanzan y están cayendo responsables, asegura que: “en el tema del narcomenudeo en Tláhuac, donde hace dos semanas la Marina abatió a Felipe de Jesús Pérez Luna, “El Ojos”, hubo un grupo que fue su aliado desde el principio: los mototaxistas. Ellos fueron quienes bloquearon calles y avenidas de la delegación, argumentando “que el señor Felipe era buena persona, nos daba trabajo”. Hoy que las órdenes de aprehensión están en barata, tratan de hacerse a un lado. Los mototaxistas se deslindaron de cualquier nexo con algún grupo criminal. Aquí nadie se salva. Ya inició el proceso de remoción del delegado, Rigoberto Salgado. Que los mototaxistas no nos digan que son blancas palomitas. Cómplices de don Felipe, sí lo fueron. ¿Eso no es delito?”.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/frentes-politicos/2017/08/05/1179763
Presión para su salida
También en Milenio se habla del tema Tláhuac su columna de trascendidos Trascendió, aquí el tema es la destitución del delegado Rigoberto Salgado, asegura que: “que el Partido de la Revolución Democrática está presionando para agilizar la salida del delegado de Tláhuac, Rigoberto Salgado, con el argumento de que esto permitirá el desarrollo de las investigaciones que lo señalan de tener nexos con el narcotráfico. Verónica Juárez Piña, secretaria de Gobierno y Enlace Legislativo de ese partido, calificó de ‘inconcebible’ que colaboradores de Felipe de Jesús Pérez, ‘El Ojos’, hayan contado con información confidencial”.
http://www.milenio.com/firmas/trascendio_nacional/Trascendio_18_1006279379.html
Por la capital
Y en temas electorales en la Ciudad de México, en el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “si ya de por sí Claudia Sheinbaum, Ricardo Monreal y Martí Batres andan en feroz competencia, ahora ya tienen compañía: el senador Mario Delgado solicitó ante el comité local de Morena ser considerado en la encuesta que, si no hay acuerdo, definirá la candidatura al gobierno capitalino. ¡Agárrense!”.
http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=117611&po=3
@loscabareteros