Desde la redacción de @loscabareteros ponemos a su consideración la “Columna de columnas nacional” del lunes 04 de diciembre de 2017. TLC 25 AÑOS: su firma se produjo en un contexto internacional de liberalismo económico donde la globalización y no el proteccionismo era la palabra del momento. Los generales y el Principito: Darle a los militares el permiso legal para que sigan haciendo lo que ya hacían me recuerda el pasaje aquel del Principito en el que un rey de un planeta al que nadie obedecía se le pasaba dando órdenes a posteriori para hacen sentir la autoridad que no tenía: “te ordeno que te sientes”… Tiempo de promesas y ocurrencias recicladas: los perdones de AMLO y Meade…
Rayuela
Dicen que en la campaña electoral que se avecina, la guerra sucia será de una magnitud nunca vista.
http://www.jornada.unam.mx/2017/12/04/
TLC 25 AÑOS
Samuel Aguilar Solís, destacado político y economista, escribe sobre las circunstancias actuales del TLCAN a 25 años de su firma: “Un 17 de diciembre de 1992 se firmaba el Tratado comercial más grande no sólo de América Latina, sino del mundo en un contexto de cambio geopolítico en donde Estados Unidos al término de la guerra fría buscaba recuperar su hegemonía perdida en los años 80´s, ante la amenaza comercial que significaron los países asiáticos y la integración de varios países de Europa. Se daba en un contexto internacional que había dejado como triunfadores de la segunda guerra mundial el liberalismo económico aterrizado en instituciones financieras (OCDE, OMC, FMI, BM etc) del orden mundial del sistema Bretton-Woods y el GATT y la democracia. La globalización y no el proteccionismo era la palabra del momento. (…) Hoy a 25 años la integración de los mercados, la disminución de aranceles, la vigencia de reglas de origen, la apertura a la inversión extranjera y de servicios financieros, el arbitraje internacional en la resolución de diferencias, la eliminación de restricciones a la movilidad del capital, entre otras es una realidad. 25 años se han ido tejiendo complejas cadenas productivas en el sector automotriz, textil, financiero, de telecomunicaciones, de transporte entre otras que han encontrado en el TLCAN un garante de certidumbre que ha regulado el comercio eliminando carreras y promoviendo condiciones de competencia de manera tal que se han incrementado las inversiones, se ha permitido la solución de controversias y se ha fomentado la cooperación entre los tres países. Según cifras oficiales, desde que inició el TLCAN en que el tratado entró en vigor, la inversión entre México, Estados Unidos y Canadá creció 128%. Hasta agosto de 2016, México, Estados Unidos y Canadá comercializaron bienes (exportación e importación) con un valor de 492,892 millones de dólares, según datos de la Secretaría de Economía. La industria que obtuvo mayores beneficios fue la automotriz, la cual, según el Inegi mantiene un crecimiento anual del 12% Hoy ha concluido la quinta ronda de renegociación del TLC y las amenazas por parte de Estados Unidos de darle fin no han sido pocas, parece ser una batalla de resultado incierto que impacta fuertemente a nuestras finanzas, como ha sido la devaluación del peso. Se esperan rondas adicionales que han sido programadas para el primer trimestre de 2018, en un contexto nacional e internacional de campañas electorales y nuestros socios comerciales saben que la contienda electoral será de alta competencia, cerrada y compleja y saben cómo aprovechar sus ventajas. (…) México mantiene 46 convenios comerciales, ninguno de la magnitud del TLC, la baja aprobación del gobierno actual, la crisis de violencia e inseguridad de privan en el país que resultan alarmantes (4 muertos cada hora), la corrupción en todos los niveles y en proporciones indignantes, y las “ventajas” como la mano de obra barata resultan ser armas poderosas para que nuestros socios comerciales puedan negociar el TLCAN con condiciones desfavorables para nuestro país; y todo ello en medio de la llamada batalla del siglo: la elección del 2018.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/tlc-25-anos.html
Los generales y el Principito
Jorge Zepeda Paterson, escribe en el portal sin embargo acerca de la Nueva Ley de Seguridad Interior: “Darle a los militares el permiso legal para que sigan haciendo lo que ya hacían me recuerda el pasaje aquel del Principito en el que un rey de un planeta al que nadie obedecía se le pasaba dando órdenes a posteriori para hacen sentir la autoridad que no tenía: “te ordeno que te sientes”, decía apresurado un instante después de que el personaje de la novela de Saint-Exupéry se había sentado. Un mandato para revestir de autoridad y legalidad a una realidad que negaba ajustarse a sus deseos. El rey decidió adecuar sus deseos y sus órdenes a la caprichosa realidad. Algo así está sucediendo ahora. ¿Resulta imposible que el ejército no cometa violaciones al actuar como policías?: pretendamos que son policías. A partir de la aprobación de la Ley de Seguridad Interior hace unos días, el ejército tendrá la cobertura legal para asumir algunas atribuciones policiacas; algo que ha venido haciendo ininterrumpidamente desde diciembre de 2006 cuando Felipe Calderón lo sacó de los cuarteles para dar piñatazos por todo el territorio contra el avispero de los cárteles de la droga. Lo que se creyó sería una operación rápida y contundente terminó transformándose en una campaña de ocupación permanente y continuada a lo largo de una década. Por lo demás, la ausencia de una justificación jurídica nunca impidió en el pasado que el ejército fuera usado por los presidentes como una especie de policía política. En los años setenta fueron el ariete para perseguir movimientos guerrilleros en las principales ciudades del país y en las montañas de Guerrero, asumiendo tareas de investigación y procesamiento propias del ministerio público. La nueva Ley de Seguridad no cambiará nada en términos prácticos salvo permitir que los generales duerman mejor cuando se vayan a la cama. Y es que a medida en que las violaciones a los derechos humanos se han venido acumulando, los militares han temido a la fragilidad jurídica con la que operan, lo cual eventualmente podría voltearse en contra de ellos. Los soldados no son policías ni fueron capacitados para la investigación detectivesca. La forma en que interroga un sargento no es precisamente un despliegue de lógica deductiva a la Sherlock Holmes; la manera en que catea un sitio un pelotón dista de ser un manual de respeto a la escena del crimen. En los últimos años docenas de oficiales han sido llevados a tribunales para que respondan por violaciones jurídicas de distinta índole en contra de la población civil. En un momento dado los generales sintieron que corrían el riesgo de que los políticos que los sacaron de los cuarteles comenzaran a usarlos de chivos expiatorios y decidieran meterlos en la cárcel. Exigieron su “permiso para matar” y ahora lo tienen. En términos prácticos las nuevas leyes tendrán escaso impacto en la situación que impera. Pero a mediano plazo las consecuencias son más que preocupantes. Otorgan una puerta de entrada a las tentaciones intervencionistas que puedan anidar generales con ánimos mesiánicos. La misma cobertura que permite tener injerencia en asuntos que competen al crimen organizado favorecen el involucramiento en cualquier agenda civil si así se lo proponen. Pero más preocupante aun es el hecho de que legitimar policialmente a los militares retrasa inexorablemente la única posibilidad de atacar el problema de fondo: mejorar los cuerpos policiacos. Los militares hacen mal el papel de los policías pero estos, los policías, lo están haciendo peor. Nunca saldremos del problema si no resolvemos esta contradicción. Por ahora, como siempre, los políticos simplemente se han quitado el problema de encima dando gusto a los militares y dejando la solución del entuerto para otro momento, para el turno de otro”.
http://www.sinembargo.mx/03-12-2017/3358489
Con licencia
En el Reforma, la politóloga y catedrática, Denise Dresser, escribe una serie de preguntas que busca hacer reflexionar al lector sobre las consecuencias que tiene la aprobación de la nueva Ley de Seguridad Interior: “toc, toc. Sí, usted. Esa persona que apoya y aplaude a las Fuerzas Armadas porque confía más en ellas que en las policías. Esa persona que no está preocupada por la Ley de Seguridad Interior ni por el papel expansivo que le concede al Ejército y la Marina. Ese mexicano tan frustrado y tan temeroso ante la ola de criminalidad y violencia que está dispuesto a darle más poder a los mandos militares que a las fuerzas civiles. Lo entiendo. Pero antes de que usted se quede varado en esa posición, le ruego lea lo siguiente. […]. ¿Sabía usted que el general Salvador Cienfuegos les habló personalmente a los gobernadores del Partido Acción Nacional para chantajearlos y presionarlos? ¿Sabía que amenazó con retirar tropas de sus estados si no apoyaban la Ley de Seguridad Interior? ¿Sabía usted que la Ley confiere facultades extraordinarias al Ejército y a la Marina, incluyendo la posibilidad de llevar a cabo tareas de investigación sustituyendo al Ministerio Público, intervenir comunicaciones privadas sin una orden judicial, y utilizar la fuerza letal para contener protestas pacíficas? […] ¿A usted no le preocupa que las Fuerzas Armadas diseñen leyes, las impongan y se erijan por encima de las autoridades civiles, dada la sangrienta trayectoria de la militarización en América Latina? […] ¿No cree usted que sería mejor una regulación que incluyera pasos para fortalecer y entrenar a las policías e ir retirando gradualmente a las Fuerzas Armadas? ¿Sabía usted que lo aprobado por el Partido Revolucionario Institucional no contempla esos pasos? ¿Sabía usted que la información sobre operativos militares será clasificada y las Fuerzas Armadas no tendrán que rendir cuentas sobre su actuación? ¿A usted le parece bien que los encargados de la seguridad del país puedan ocultar lo que hacen, como ocurrió en Ayotzinapa, por ejemplo? […] ¿Sabía usted que Salvador Cienfuegos tiene razón cuando dice que las Fuerzas Armadas ‘no estudiaron para perseguir delincuentes’? ¿Entonces por qué se les está dando el poder para seguir haciendo lo que dicen que no saben hacer? ¿Por qué el gobierno de Peña Nieto está expandiendo el papel del Ejército para combatir la delincuencia, cuando el propio Ejército ha reconocido que no hace bien esa labor? ¿Sabía usted que con el nuevo marco legal que el Ejército ha pedido y el gobierno apoya, sería mucho más fácil usar a las Fuerzas Armadas para reprimir conflictos sociales, estudiantiles, ambientales y post-electorales? […] ¿Podría usted -buen ciudadano- terminar de leer este texto e ir al sitio de @SeguridadSinGuerra para exigir que el Senado rechace una Ley de Seguridad Interior que dañará a su país, dándole a quienes no deben tenerla, una licencia para matar?”.
Tiempo de promesas y ocurrencias recicladas
Aunque todavía no son tiempos oficiales de precampaña, tanto Andrés Manuel López Obrador como José Antonio Meade han comenzado a lanzar propuestas, que a decir verdad son bastante cuestionables pues, por un lado, López Obrador propuso amnistía para los líderes criminales con tal de que vuelva la paz, esto, sin pensar en todas las víctimas y sus familiares que reclaman justicia, y por otro lado, Meade, dijo que haría de México una potencia, que permita a todos vivir mejor, pero, no dijo cómo, además de que esas mismas ideas habían sido anunciadas hace 30 años y el resultado fue una severa crisis económica, y abundando en el tema, hoy en El Universal, el periodista Salvador García Soto, escribe que: “a 10 días de que comiencen oficialmente los tiempos de ‘precampaña’ del Instituto Nacional Electoral, los precandidatos simulados […] comienzan su concurso y carrera de promesas recicladas, ocurrencias y hasta comentarios de franca demagogia. […]. Ayer y el sábado hubo dos primeras muestras de esas ocurrencias que, con mercadotecnia y labia política, soltarán los candidatos a raudales. La primera surgió del discurso y el mensaje con el que José Antonio Meade se convirtió en ‘precandidato oficial’ del Partido Revolucionario Institucional, al recibir en la sede nacional del partido que lo postula, sin ser priísta, el certificado que lo acredita como tal. ‘Vamos a hacer de México una potencia que permita que todos vivamos mejor… Vamos a proponer una vía clara, realista y sensata de lo que México puede llegar a ser. De lo que va a llegar a ser cuando ganemos la Presidencia de la República’, dijo Meade. […]. Tal parece que la tecnocracia, a la que pertenecen Meade, Salinas y Zedillo, reciclará sus promesas de prosperidad, crecimiento y desarrollo ‘como potencia’, basados solo en el manejo impecable de la macroeconomía y la disciplina fiscal que en 30 años nos ha dado estabilidad, pero no crecimiento suficiente ni empleos bien remunerados y que sólo ha aumentado la pobreza y ahondado la desigualdad de un puñado de familias de las más ricas del mundo, con más de la mitad de la población en pobreza. […]. Lo lamentable es que la visión de enfrente, la que dice tener también la solución a todos los males y problemas nacionales por la magia de que ‘si la cabeza cambia y es honesta, todo lo demás va a cambiar’, también cae en el simplismo y la demagogia. El sábado Andrés Manuel López Obrador habló de la violencia del narcotráfico que está azotando a buena parte del país, con ejecuciones, secuestros, extorsiones y cuerpos desmembrados, la misma que ha afectado a millones de familias mexicanas, y abrió una polémica al decir que, para ‘pacificar al país’ y acabar con esa violencia irracional y desbordada, piensa proponer una ‘amnistía’ a los jefes del narcotráfico y el crimen organizado. ‘Vamos a hacer todo lo que se pueda, para que logremos la paz en el país. Que no haya violencia’, dijo el sábado en Guerrero, López Obrador. […]. ¿Qué pensarán esas familias, que en México se cuentan ya por millones en los últimos 10 años, que han sufrido el dolor de la orfandad, de perder a un padre, una madre, un hijo o hermano por la violencia de ‘perdonar’ a los criminales que nunca recibieron castigo por sus crímenes? […]. Lo dicho, vienen tiempos de ocurrencias, demagogia y promesas recicladas de llevarnos al “primer mundo”. Pobre de quien las crea”.
Los perdones de AMLO y Meade
En La Jornada, el periodista Julio Hernández López, escribe acerca de las declaraciones que realizaron el fin de semana dos de los principales candidatos presidenciales en estos momentos, pues Andrés Manuel López Obrador mencionó en una parte de su discurso del sábado en Guerrero, que analizaría una posible amnistía para criminales con tal de que regrese la paz al país, y en el caso de José Antonio Meade, a pregunta expresa de si va a investigar casos de corrupción de la actual administración, involucre a quien involucre, no se comprometió a decir que sí, por lo que del tema nos cuenta que: “al catálogo original de exención de responsabilidades que ya había dado a conocer […], Andrés Manuel López Obrador añadió el boceto de otros perdones, desde ahora muy polémico el simple esbozo referido a narcotraficantes: Si es necesario, vamos a convocar a un diálogo para que se otorgue amnistía, siempre y cuando se cuente con el apoyo de las familias de las víctimas, y no descartar el perdón. […]. La ruidosa declaración del tabasqueño ha sido lo más puntual que hasta ahora ha pronunciado en un cierto contexto relacionado con un tema mayor de discusión y de eventual protesta social, la programada aprobación […] de la Ley de Seguridad Interior que consolidará la militarización del país y abrirá el camino a la declaratoria, a discreción del poder ejecutivo federal, de virtuales estados de excepción legalizados. El dirigente máximo de Morena no ha hecho declaraciones tronantes contra ese intento que, en todo caso, está bien apreciado en el proyecto de nación aprobado por Morena en su pasada asamblea nacional: Si el Ejército Mexicano continuara en las calles, sería necesaria una ley de seguridad interior, ya que no es factible que el Ejército continúe haciendo labores de seguridad pública que no le corresponden sin un ordenamiento legal apropiado. […]. Con menos revuelo mediático en su contra, José Antonio Meade Kuribreña también ha dado a conocer sus cartas de perdón. Javier Lafuente, durante una entrevista para el diario español El País, le preguntó: Pero, para que quede claro: ¿usted está dispuesto a investigar casos de corrupción de esta administración, involucre a quien involucre?, a lo que, en consonancia con otras aseveraciones hechas en el cuerpo de dicha entrevista, Meade respondió: ‘Es que me parece que caemos de nuevo en el planteamiento personal. Tenemos que movernos en un esquema en el que la pregunta no sea válida. Un esquema que funcione para todos, en donde el acceso a la justicia y a la rendición de cuentas sea igual para cualquier funcionario. Vamos a funcionar bien cuando la pregunta deje de tener mérito. Cuando alguien piensa: El problema depende de es que no entiende el problema de fondo’. […]. A fin de cuentas, Meade va caminando, en estos primeros pasos, con un aire de rehén (como Luis Donaldo Colosio en 1994) de los factores que lo han destapado y que pretenden elevarlo como candidato creciente e instalarlo en Los Pinos al costo que sea. Se ha desvivido en mostrar fidelidad a Peña Nieto, exaltándolo a niveles impropios de un (pre)candidato que buscara impulsar alguna mascarada de cambio respecto a la muy difícil situación del país”.
http://www.jornada.unam.mx/2017/12/04/opinion/008o1pol
Meade y AMLO
Aunque todavía no son tiempos oficiales, las campañas políticas ya han comenzado, más específicamente en los casos de Andrés Manuel López Obrador y José Antonio Meade, y al menos en el arranque parecen tener muchas contradicciones. En Milenio, el periodista, novelista e historiador Héctor Aguilar Camín, escribe que: “cables cruzados: José Antonio Meade no es miembro del Partido Revolucionario Institucional, pero es el candidato del Partido Revolucionario Institucional. El único candidato sin partido hasta ahora, aparece como el abanderado del partido más viejo: ese Partido Revolucionario Institucional que tanto ha tratado en estos días de parecerse al Partido Revolucionario Institucional de ayer y de siempre. Un funcionario de cabeza moderna es llevado a la nominación de la manera más arcaica y va a pedir a los más arcaicos de su nuevo partido, que lo hagan suyo. Un funcionario sin fama de corrupto es el sucesor propuesto del gobierno con mayor fama de corrupción de la historia reciente de México. […]. Un candidato persuadido de que las reformas iniciadas durante estos años son fundamentales para el país aparecerá en estas elecciones como el abanderado de la continuidad. En suma, un candidato partidario del cambio que está en curso saldrá a la campaña como el abanderado del statu quo. Del otro lado del espectro, Andrés Manuel López Obrador, el candidato con una visión del mundo característica del priismo de los 70 del siglo pasado, aparece como el abanderado del antipriismo y el antisistema de hoy. El candidato que va en su tercera campaña a la cabeza de un partido, fundador de un partido él mismo, se presenta, no obstante, como campeón de la antipartidocracia. […]. El candidato que ha encabezado las más grandes riñas de la democracia mexicana, aparece como el abanderado de la ‘república amorosa’. En suma, el candidato de la restauración se presenta, en sus propias palabras, como el candidato de la regeneración nacional, el candidato del cambio. Estos son los candidatos que tenemos ya en campaña el día de hoy: dos paradojas. Presentan demasiadas contradicciones a despejar para un electorado en ascuas, que lo que quiere es un cambio, pero no sabe exactamente cuál y que parece gobernado por la más impaciente de las razones: el hartazgo. Digamos que ha empezado la campaña presidencial y que tiene los cables cruzados”.
La semana del Frente
Se acaba el tiempo y va siendo momento de que el Frente Ciudadano por México escoja quién será su candidato, lo que supondría la consolidación de la alianza, y es que después de las confirmaciones de Andrés Manuel López Obrador y José Antonio Meade como precandidatos de Morena y el Partido Revolucionario Institucional, se está quedando rezagado. Hoy en el Excélsior, su director, el periodista Pascal Beltrán del Río, escribe que: “resueltas las candidaturas en dos de los tres polos de la próxima contienda electoral […], ahora toca al Frente Ciudadano por México entrar en escena. López Obrador y Meade ya tuvieron sus semanas mediáticas y no se quedaron cortos en la generación de expectativas, cuando menos las de sus simpatizantes más convencidos. ¿Logrará lo mismo el Frente? Me refiero, de entrada, al cierre de filas que mostraron morenistas y priistas en sus respectivos bandos. Pero, sobre todo, a la convicción de los suyos de que están frente a una candidatura que potencialmente puede ganar la elección presidencial del domingo 1 de julio. […]. Pero, a diferencia de sus rivales, el Frente Ciudadano no ha sabido usar los tiempos a su favor. []. El ejemplo más acabado de ello es el método de postulación por el que han optado estas tres fuerzas. Mientras que en Morena y el Partido Revolucionario Institucional la decisión verticalísima para decidir quién los representará en la boleta se adopta sin duda ni pudor, el Frente está todavía decidiendo cómo lo hace, lo cual lo hace parecer sumamente inseguro. […]. ‘Eso todavía se está negociando’, me dijo, ayer por la tarde, un importante miembro del Frente. Para mí, lo único que logra la coalición Partido Acción Nacional-Partido de la Revolución Democrática-Movimiento Ciudadano con esa tardanza es abaratar su marca. […]. Durante semanas, se machacó que el Frente pondría por delante su programa. ¿A usted le queda claro lo que busca esta coalición? No es fácil saberlo cuando ni siquiera hay certeza de que los tres partidos participantes lograrán converger en torno de una misma candidatura. A las advertencias lanzadas por el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, de que él se deslindaría del Frente si éste no aprobaba un método democrático para lanzar al candidato común, el pasado fin de semana surgieron voces […] para que el Partido de la Revolución Democrática se olvide de la coalición con el Partido Acción Nacional y pida frías a Morena. […]. De por sí el Frente […] se enfrenta con la dificultad de decidir si es una alternativa antiPRI o antiMorena. No puede ser simultáneamente las dos cosas; tiene que elegir a un rival para poder meterse a la final que siempre se genera en las elecciones presidenciales en México. Ahora el Frente tiene un nuevo reto: la amenaza de que una parte de sus electores potenciales lo abandone para apoyar a Meade y otra parte lo haga para apoyar a López Obrador. Pero no adelantemos vísperas. Veamos cómo resuelven los frentistas los anteriores dilemas. Esta misma semana tendremos noticias”.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/pascal-beltran-del-rio/2017/12/04/1205378
Trivia presidencial: ¿de quién estoy hablando?
En El Universal, el periodista Carlos Loret de Mola, escribe una serie de características que describen a los principales candidatos presidenciales en estos momentos, y sin decir a quién de los dos se refiere, por lo que nos explica que: “en medio de la desatada sucesión presidencial de cara a las elecciones del 2018, propongo una trivia: ¿de quién estoy hablando? En su carrera política cambió de bando. Primero bajo unas siglas, luego bajo otras. Y ahora, como estrategia electoral, busca acercarse a los del partido político anterior para atraer votos a su causa. […]. Su presencia en la carrera presidencial se considera casi mesiánica: cuando todo parece perdido, los suyos lo promueven como el único capaz de evitar una especie de previsible colapso total, una suerte de sepultura nacional en caso de que su rival gane las elecciones. Sus fanáticos no le ven nada malo. Nada. Pero eso sí, atribuyen a su principal adversario cualquier cantidad de complicidades secretas y planes malévolos. La mayoría de estas denuncias no tienen ningún respaldo en datos duros, no hay pruebas, son fake news, noticias falsas. Pero circulan entre sus más fervientes como verdades incontestables. Se comparten en redes sociales para agitar. Y si alguien se atreve a desafiarlas, es de inmediato descalificado y condenado. Sin embargo, si alguien se va al historial de su gestión, si alguien analiza a detalle la manera en que manejó el poder ejecutivo cuando lo tuvo en sus manos, no hay nada que respalde los atroces dichos en su contra. […]. Su aspiración presidencial es fruto de la decisión de un solo hombre. Cualquier asomo de rebelión o disidencia interna en el partido que lo postula es inmediatamente sofocada… por las buenas o por las malas. No hay contrapesos significativos. ¿Estoy hablando de Andrés Manuel López Obrador o de José Antonio Meade Kuribreña? ¿Del postulado por Morena o del postulado por el Partido Revolucionario Institucional? Si pensó en uno de los dos, trate de leer de nuevo el texto teniendo en mente el nombre del otro. A ver qué pasa. ¿Son entonces lo mismo? No. Absolutamente no. Al contrario, como pocas veces en la Historia de México, ese hombre en el que usted está pensando […] protagoniza una contienda que si bien es de nombres propios, de abultada currícula y de partidos, se plantea como una disputa de modelo de país, en donde él representa una cosa y su rival otra completamente distinta. Pero ya sabe cómo son los polos opuestos”.
Problemas para constructores de gasoductos del norte del país
En el diario Reforma, su columna de trascendidos Templo Mayor, asegura que: “siguen las malas noticias -y malas señales- para las empresas que invierten en la construcción del sistema de gasoductos en el norte del país, por encargo de la Comisión Federal de Electricidad. Primero fue el ducto de la estadounidense IENova, que va de Guaymas a El Oro, en Sonora: fue dañado y está bloqueado por una comunidad yaqui desde mediados de año. Y ahora le tocó al gasoducto Samalayuca-Sásabe, que construye Carso Energy, de Carlos Slim. Pese a que la empresa había conseguido que los ejidatarios le otorgaran el derecho de paso ante notario, un juez de Chihuahua otorgó una suspensión contra la obra. Es decir, aunque ya se tenía un acuerdo, ahora se busca reabrir las negociaciones y obtener nuevos beneficios. Lo grave es que el ducto debería entrar en operación a principios de 2018, pues cada vez es mayor la demanda de gas natural de Estados Unidos. Esta suspensión no detiene una obra, sino la continuación de un proyecto de ¡650 kilómetros!, que cruza Chihuahua y Sonora, y que implica una inversión de 600 millones de dólares. Llama la atención que quien está detrás del negociazo de la “asesoría legal” a quienes se oponen al ducto es Raymundo Gaxiola Santacruz, abogado que ya recorrió ese miiismo caminito con el gasoducto Sásabe-Guaymas”.
Algarabía
Luego de que José Antonio Meade oficializara su registro como precandidato presidencial por el Partido de la Revolución Democrática, al interior del partido hay esperanza en que podrán ganar las elecciones de la mano de Meade, una apuesta arriesgada pues es la primera ocasión en que acceden a registrar a alguien sin pasado partidista, y de esto, hoy en el Excélsior, su columna de trascendidos, Frentes Políticos, asegura que: “el Partido Revolucionario Institucional cambió los modos y las formas, pues José Antonio Meade quedó registrado como el primer candidato no priista a la contienda presidencial. La felicidad fue total en la sede del partido, los gritos de la militancia se hicieron presentes: ‘¡Vamos a ganar!’, los priistas recibieron a Meade con ovaciones. El ex Secretario de Hacienda solicitó formalmente su registro ante la Comisión Nacional de Procesos Internos del Partido Revolucionario Institucional. Funcionarios y militancia arroparon al hombre que ha dirigido diversas secretarías de Estado en dos sexenios, bajo las siglas de Acción Nacional y el Revolucionario Institucional. El camino rumbo a la elección presidencial es largo, lo cierto es que el Partido Revolucionario Institucional demostró que está más unido que nunca y eso puede marcar la diferencia en el momento indicado. Veremos”.
http://www.excelsior.com.mx/opinion/frentes-politicos/2017/12/04/1205386
Pasarela de aspirantes a la Auditoría Superior de la Federación
El fin de semana comenzaron las entrevistas en San Lázaro con quienes aspiran a ser los titulares de la Auditoría Superior de la Federación, y aunque hay algunos candidatos que pasaron las primeras pruebas, no fue el caso de Iván López Fernández, ex contralor de Javier Duarte en Veracruz, quien a decir de los legisladores, su postulación es “impresentable”, y hoy en Milenio, su columna de trascendidos Trascendió, asegura que: “que de los aspirantes a encabezar la Auditoría Superior de la Federación que comparecieron el fin de semana en el Palacio de San Lázaro, Ángel Trinidad Zaldívar, ex comisionado del INAI, y Alejandro Torres Palmer, ex contralor de Puebla, fueron dos de los más fuertemente cuestionados, aunque al final causaron mejores impresiones a los diputados. Iván López Fernández, ex contralor de Javier Duarte en Veracruz, acreditó los requisitos formales para ser candidato al máximo órgano de fiscalización, pero su descalificación es inminente ante la coincidencia generalizada entre los legisladores respecto a que su postulación es ‘impresentable’”.
http://www.milenio.com/firmas/trascendio_nacional/Trascendio_18_1078872117.html
Pleito callejero entre Chuchos y ADN
Luego del anuncio de que su presidenta Actual, Alejandra Barrales, tiene que dejar el cargo, al interior del Partido de la Revolución Democrática hay una batalla para ver quién se queda con la nueva presidencia, ya que de eso va a depender el futuro del Frente Ciudadano Por México, y hoy en El Universal, su columna de trascendidos Bajo Reserva, asegura que: “desde hace unos días y luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación resolviera que Alejandra Barrales debe dejar la presidencia del Partido de la Revolución Democrática, ha comenzado una pelea callejera entre las tribus Nueva Izquierda y Alternativa Democrática Nacional por ver quién se queda con la dirigencia del partido. Nos comentan que Nueva Izquierda, de los Chuchos Ortega y Zambrano, busca a toda costa presidir el partido para evitar que su contraparte, Alternativa Democrática Nacional, rompa con el Frente Ciudadano por México y acabe con todo el acuerdo electoral rumbo a 2018. Las corrientes amarillas se están jugando el todo por el todo para los comicios presidenciales…”.
@loscabareteros